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Germán Martínez Cázares, titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), solicitó a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) una medida cautelar para evitar que los servicios de atención y entrega de medicamentos a familiares de los niños que fallecieron en la guardería ABC sean interrumpidos.
Luego de que familiares afectados en 2009 denunciaron que por órdenes de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) el instituto dejaría de brindarles atención médica, el director del IMSS acudió a las oficinas de la CNDH para presentar un escrito.
“Solicité lo que se conoce como medida cautelar, es una intervención de urgencia ante la CNDH a efecto de no interrumpir los servicios y medicamentos que se les prestan desde el IMSS”.
Enfatizó que la atención a los lesionados menores de edad y adultos “nunca se les ha interrumpido la prestación del servicio o los medicamentos que necesitan”.
En el documento que entregó a la comisión, se indicó que todas las autoridades tienen, en el ámbito de su competencia, la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia e indivisibilidad.
“Yo no quiero que se interprete nada fuera de la ley, el IMSS está para cumplirla, pero necesito una intervención urgente de la CNDH para que los familiares estén atendidos”.
La CNDH informó que recién recibió el escrito de manos del director del IMSS, el cual será debidamente analizado “y se dará la respuesta que proceda con base en nuestro marco jurídico”.