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La paridad de género en cargos de elección popular ha podido avanzar debido a legislaciones y lineamientos impuestos; sin embargo, el mayor rezago se encuentra en los municipios, donde en las pasadas elecciones se registró un retroceso, señala la consejera electoral Norma Irene de la Cruz.
En entrevista con EL UNIVERSAL, la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género y No Discriminación del Instituto Nacional Electoral (INE), dice que para el caso de los puestos de representación popular queda un camino largo por recorrer.
¿En paridad existe retraso legislativo e ideológico?
—Sí, estamos hablando de manifestaciones estructurales. Tenemos una idea de lo que es normal y hay resistencias; muchas veces pueden ser inconscientes de las mujeres. El nivel académico de candidatas es más alto que de candidatos, pero a ellos no se les cuestiona y a ellas sí, independiente de su experiencia, su trayectoria profesional o en lo que se desarrollen.
Tenemos que destruir mitos y romper estereotipos que nos van diciendo que a las mujeres les toca uno u otro lugar, porque aquí tenemos otro nivel de complacencia.
¿Cómo lograr la paridad más allá de lo electoral?
—Tiene que ver con cómo estamos en cada una de las instituciones en el interior y exterior. Por ejemplo, en el INE es la primera vez que hay cinco consejeras. Nosotras, en el interior del instituto, vemos que necesitamos hacer muchas cosas para lograr la paridad en la toma de decisiones.
¿Las mujeres detectan la violencia política en razón de género?
—Lo que estamos encontrando es que efectivamente hay esta cosa abstracta de violencia política. Lo estamos nombrando; hasta hace poco tiempo no podíamos. Hasta 2017 había un protocolo, pero tener un andamiaje legal que permita visibilizarlo, eso es el avance. Efectivamente queda mucho trabajo por hacer. De pronto olvidamos que la violencia política en razón de género es una expresión más de las diferentes violencias a las que estamos expuestas.
¿Qué puede generar la paridad total?
—Lograr la igualdad no sólo en números, sino sustantiva. Lamentablemente queda un camino largo para que logremos paridad en todos los puestos, no sólo de representación popular, sino de decisión. Eso lleva a un trabajo conjunto de instituciones, organizaciones y en lo individual para normalizar que la paridad es una medida permanente, y a pesar de la resistencia, se sigue avanzando.
¿Es triunfo del instituto electoral la paridad en diputados y en candidaturas para gubernaturas?
—No es logro de una institución o de una persona. Es el fruto del esfuerzo y de la lucha de muchas mujeres que han estado antes que nosotras y ahorita nosotras estamos en estas posiciones en donde podemos tener incidencias y tomamos decisiones que nos tienen que llevar a avanzar.
¿Dentro del INE hay que romper barreras?
—Estamos avanzando. Tenemos que deconstruir muchas prácticas culturales y por eso ahora nosotras revisamos en el interior los lineamientos del servicio profesional electoral, para tener paridad en los puestos de decisión para que el personal que hace posible la organización de las elecciones también sea de manera paritaria. Todas las resistencias las tenemos que ir aflojando o dándoles la vuelta.
¿Para 2024 se puede lograr la paridad total?
—No creo que haya que ponerle fecha, estamos dando pasos agigantados. Tenemos varios procesos antes de 2024. Puede ser que alcancemos la paridad numérica.
Yo sí espero que para 2024 sea una nueva marca, porque tendremos una renovación de congresos, además de varios gobiernos locales .
