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Un juez federal ordenó de nuevo mantener bloqueadas las cuentas de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) como parte de las investigaciones por lavado.
El juez Segundo de Distrito en el estado de Hidalgo declaró que el congelamiento de cuentas contra la UAEH, decretado desde febrero de 2019, respondió a una solicitud de cooperación internacional realizado por la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), razón por la que debe permanecer vigente.
En su petición, la DEA informó al gobierno mexicano que mantiene una investigación por lavado de dinero contra la universidad y solicitó impedir que se disponga de los recursos de estas cuentas, que suman 151 millones de dólares.
La resolución derivó de un incidente de modificación de suspensión definitiva tramitado dentro de un juicio de amparo que presentó la UAEH contra el bloqueo de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
Inicialmente en el amparo, el juez negó la suspensión definitiva porque la UIF presentó la solicitud de la DEA para justificar el congelamiento de las cuentas.
Contra esta decisión, la UAEH tramitó un recurso de revisión ante el Segundo Tribunal Colegiado en Hidalgo que revocó la orden del juez y decretó la liberación de las cuentas bancarias.
El juicio de amparo continuó su tramitación y el juez decidió sobreseer el asunto y con ello dejó sin efectos las suspensiones concedidas, por lo que el bloqueo prevaleció.
La universidad impugnó la sentencia del juez y el Segundo Tribunal Colegiado ordenó reponer el procedimiento, es decir, reabrir el caso.
En la reposición del procedimiento el juez concedió de nuevo la suspensión definitiva para liberar las cuentas porque la UIF no exhibió el oficio de la DEA, a pesar de que éste permanecía en el resguardo del juzgado y en el expediente original clasificado como confidencial para salvaguardar la identidad de los agentes que investigan a la UAEH.
Por eso, la UIF tramitó el incidente de modificación de la suspensión definitiva en el que alegó que la UAEH no ha acreditado la licitud del origen de los 151 millones de dólares que tiene en seis cuentas bancarias y que, por ello, deben permanecer bloqueadas.
EL UNIVERSAL informó la semana pasada que la UIF detectó que Gerardo Sosa Castelán, presidente del patronato de la UAEH, ha cometido actividades irregulares desde 2019 a la fecha, por lo que emitió una nueva orden de bloqueo contra las cuentas bancarias de la casa de estudios. Ello, debido a que las cuentas no están a nombre de Sosa Castelán sino del patronato de la UAEH, pero están vinculadas con sus actividades con supuestas irregularidades.