Tijuana, BC.— Hasta 30 alcancías con un precio máximo de 50 dólares y mínimo de 25, con el rostro de Donald Trump, el nuevo presidente de Estados Unidos, se venden a diario en la avenida Internacional de Tijuana, el cruce fronterizo más transitado del mundo, ubicado entre esta ciudad y San Diego, California.
Las primeras imágenes en ser replicadas para convertirse en alcancía fueron el rostro de Andrés Manuel López Obrador, expresidente de México; luego Claudia Sheinbaum, actual mandataria federal, y Kamala Harris, exvicepresidenta y excandidata a la Casa Blanca, pero tras el atentado contra Trump en Pennsylvania, los artesanos consideraron darle una oportunidad a la figura que, según sus testimonios, se ha vendido muy bien.
“Las primeras que vendíamos mucho eran las de López Obrador. Hoy ya tenemos a la actual presidenta de México en la historia, Sheinbaum Pardo, pero la verdad, Donald Trump se ha vendido mejor desde que sufrió un atentado en su campaña”, explicó Leonardo, un vendedor callejero, a EL UNIVERSAL.
En la vialidad, por la que a diario pasan miles de personas para ir o venir de Estados Unidos, decenas de vendedores reparten en hombros las figuras: “¡Llévese a Donald Trump! ¡Lléveselo vendado de la oreja! ¡A 25 dólares!”, gritan los hombres que, en su mayoría, son deportados y compran las alcancías a los artesanos tijuanenses para el comercio informal.
Uno de ellos es Leonardo, quien fue deportado a México hace unos años tras haber entrado al país vecino de forma ilegal. Hoy tiene trabajo gracias a los puestos de souvenirs que se encuentran establecidos en la avenida Internacional de Tijuana.
Como él, decenas de personas se instalaron en los bordes de esa avenida y calles aledañas cargando en sus hombros las alcancías que tienen un costo de entre 20 y 25 dólares “pero si vemos que la gente puede pagar más, hasta 50 les cobramos”, presumió el vendedor.
En un sondeo realizado por este medio informativo, otros artesanos dijeron que entre los artículos más vendidos, además de las alcancías, se encuentran cobijas, recuerdos de México y comida de los puestos ambulantes.
Conductores curiosos se asoman por las ventanillas para preguntar el costo de los artículos. Aunque las alcancías cuestan el equivalente a casi 500 pesos, muchos connacionales las compran, pero según los comerciantes, los estadounidenses que provienen de California son sus principales clientes.
“A los compadres de México se las damos hasta en 20 dólares, pero luego llegan unas camionetas que se ven de gente rica, y les vendemos la alcancía hasta en 50 dólares, que son casi mil pesos, pero lo pueden pagar y es negocio para uno también que tiene la necesidad de seguir inventando cosas para vender”, dijo otro mercader a este diario.
Tras el éxito de las figuras de yeso con el rostro de Trump, los artesanos idearon crear otra imagen del presidente de Estados Unidos, pero esta vez le pusieron una gasa blanca en su oreja derecha, misma que se hizo un símbolo para sus simpatizantes el 13 de julio del año pasado, tras el atentado en su contra en un mitin en Butler, Pennsylvania.
Comentaron que el mayor auge de ventas ocurrió por primera vez en la campaña presidencial del republicano y después cuando fue víctima del intento de asesinato que le hirió una oreja.
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“Pues qué le puedo decir, somos mexicanos, a todo le encontramos”, bromeó Leonardo a pregunta expresa sobre cómo nació la idea de hacer esta figura.
De acuerdo con los vendedores, hay clientes que se llevan desde una hasta 30 figuras a San Diego y, en México, han tenido compradores que las llevan por mayoreo para usarlas como tiro al blanco.
Últimamente la frecuencia ha sido variable, aunque esperaban que las ventas aumentaran debido al triunfo electoral de Trump y su posterior toma de posesión; sin embargo, esto no ocurrió, pero mandaron a hacer al mandatario estadounidense de forma burlona en calabazas anaranjadas en las que aparenta gritar, de pie saludando a la bandera y con su típica sonrisa sarcástica con la que se han hecho memes en las redes sociales.