El elegir un árbol natural para Navidad nunca ha sido tarea fácil, y menos cuando muchas personas lo consideran como un integrante más de la familia, lo que hace que esta búsqueda sea muy intensa.
Para adquirir un pino para decorar, algunas familias optan por acudir a distintos lugares donde se exhiben los arbolitos, pero una opción que siempre ha cautivado a las personas es el poder elegir y cortar el árbol que más les guste.
“En el norte de Europa, en lo más frío, seco y duro del invierno, la gente cortaba un árbol para llevarlo a su casa y adornarlo con velas para recordar que el invierno era algo pasajero y el llevar un árbol de plástico a tu casa no es lo mismo”, comentó Carlos Maurer, director de Bosque de los Árboles de Navidad
Es por ello que existen algunas plantaciones en la ciudad y su periferia que se han vuelto los lugares favoritos para la selección del pino; tal es el caso del Bosque de los Árboles de Navidad ubicado en Amecameca, Estado de México.
Este lugar, según su dueño, es la plantación más grande del mundo en el sistema “escoja y corte su propio árbol de Navidad”, con una extensión de 500 hectáreas.
Lo que más llama la atención de este bosque es la experiencia de comprar; al llegar te brindan los utensilios necesarios para que tu familia y tú suban a las plantaciones y elijan el árbol que más les guste.
Entre las especies que puedes adquirir en tu visita están los pinos de agujas cortas, llamados Douglas Fir, y los de agujas más largas nombrados Vikingos, los cuales son mucho más tupidos.
El precio del pino de tamaño normal es de mil 400 pesos y por cada uno que se vende están obligados a plantar más, precisó Carlos Maurer.
“Lo más importante del Bosque de los Árboles de Navidad en Amecameca es que las familias saben que cuando vienen a cortar su árbol de Navidad aquí, el árbol no muere, el árbol retoña”, puntualizó.
El proceso que realizan los trabajadores del bosque comienza desde la preparación de la semilla, posteriormente, ya germinada, se coloca en unos recipientes donde el pino crecerá hasta que sea apto para llevarse a las plantaciones, ya sembrados, el proceso de crecimiento tardará unos ocho años.
Carlos Maurer, encargado del Bosque de los Árboles de Navidad, comentó que para las personas que adquieran un árbol natural y gusten que éste se mantenga en un mejor estado y dure toda la temporada, deberán colocarlo en una base llamada “base fuente”, en donde se le coloca agua al pino para que dure mucho más tiempo con su característico olor y color.
El Bosque de los Árboles de Navidad se encuentra en la carretera federal México-Cuautla, kilómetro 53.5, Amecameca de Juárez, en el Estado de México, con un horario de 8:00 a 17:30 horas, los siete días de la semana.