POZA RICA, Veracruz.- “No nos vamos a levantar tan fácilmente”, asegura Rodrigo González Márquez , uno de los centenares de damnificados por el paso del huracán “Grace” en el municipio de Poza Rica, Veracruz.
Por ello desde la colonia Los Sauces , devastada por los fuertes vientos del meteoro, él y su familia piden al presidente, Andrés Manuel López Obrador, demostrar que verdaderamente está con los más pobres y les envíe ayuda para reconstruir sus casas.
“No nos vamos a levantar tan fácilmente, cuando un desastre de estos se pasan 15, 20 días, quizá un mes, dos meses que no nos vamos a levantar tan fácilmente, pero con la ayuda de nuestro Presidente, sabemos que él tiene la iniciativa de ayudar a la gente más pobre y que nos lo demuestre esta vez que verdaderamente está con nosotros”, menciona.
De oficio fotógrafo, el señor Rodrigo González afirma cabizbajo que con la pandemia de Covid-19 , que lleva más de un año, y luego con el golpe del huracán al norte y centro de Veracruz, se sienten más abajo.
“Son cosas de la naturaleza, hay que darle gracias a Dios que tenemos vida, ahorita ya ve cómo ha estado la pandemia y sinceramente con esto, más abajo nos sentimos. Con la ayuda de Dios y nuestros gobernantes siento que vamos a salir adelante”, confía.
Recuerda que Poza Rica fue uno de los muchos municipios veracruzanos que apoyaron a Andrés Manuel López Obrador para llegar a la Presidencia de la República, “por lo que espero que hoy que más lo necesitamos, que nos eche la mano que voltee para acá y que diga que Poza Rica nos echó la mano y órale, vamos a apoyarlos, porque da tristeza ver a la gente cómo está batallando, está sufriendo en estas pérdidas”, indicó.
“No nada más aquí, también en otras colonias, por ejemplo en Mecánicos de Piso está todo destruido, para la Antorcha también está destruido y ahora sí que necesitamos que el gobierno federal voltee para Poza Rica, sinceramente”, añade.
Con más de 30 años de vivir en Los Sauces, el señor Rodrigo González relata que los vientos de “ Grace ” desprendieron las láminas del techo de su casa y las paredes de madera, además de que algunos de sus instrumentos de trabajo se echaron a perder por el agua.
“Unas botargas para trabajar, todo está mojado y la verdad ahorita no hay trabajo, la situación está crítica ahorita no se pueden acercar los clientes por lo de la pandemia, en los salones no hay trabajo rara la vez que hay y eso porque se arriesgan. Las iglesias las acaban de abrir no hace mucho, nos ha perjudicado un poco”.
Asegura que se ha enfermado de Covid-19 en dos ocasiones, el año pasado y hace seis meses, “estuve botado, pero gracias a Dios toda mi familia ya lo superamos, aquí estamos”.
Además, Rodrigo González afirma que tiene a su cargo a Julio Sánchez Cruz, un hombre inválido y ciego, abandonado por su familia. “Este hombre me llegó desde hace 30 años, la familia no lo quiere, lo dejó. Hemos ido a ver a su familia, pero no quiere nada con él, nosotros batallamos con él tenemos que andarlo moviendo, lo jalamos para donde sea..
“Queremos mandarlo operar, pero queremos que nos apoye el gobierno a haber si nos echa la mano porque está ciego el hombre, no ve nada y batallamos con él hay que moverlo para que vaya al baño, para que se vaya a acostar, no ve nada”.
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kl