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En conmemoración del Día Mundial de Bendecir a los Animales, cientos de perritos, gatitos y otras mascotas fueron bendecidos en distintas iglesias del país. En el caso de la Ciudad de México, la Catedral Metropolitana y las parroquias de San Judas Tadeo, San Juan Crisóstomo, San Francisco Tultengo, José de los Cedros y Santiago Apóstol Tlatelolco recibieron en sus templos a animales en compañía de sus dueños.
El fray Eduardo Jímenez explicó a EL UNIVERSAL que la bendición de los animales es una oración para pedir a Dios que proteja a las criaturas que acompañan la vida del hombre. Precisó que la historia de esta tradición comienza con el monje San Antonio Abad, cuando se retiró al desierto para conservar su vida a Dios. Ahí, los animales lo visitaban, y como él los trataba bien, se dice que algunos animales le llevaban cosas para comer.
“Ellos forman parte también de nuestro entorno, de nuestra vida, nos acompañan cuando estamos enfermos, en soledad. Y lo hacemos el día de hoy de San Antonio Abad, precisamente porque él era un amante de los animales”, indicó mientras bendecía a un gatito en su transportadora.
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Por lo que, dijo, se realiza en memoria de San Antonio, un hombre que amaba a los animales. Así, se hace la bendición de todos los seres que acompañan, dan alegría y consuelan las tristezas de las personas. El fray agregó que esto se hace dos veces al año: en la fiesta de San Benito Abad y en la de San Francisco el 4 de octubre.
“Hay una historia muy fuerte sobre una hembra de jabalí que llegó a donde estaba Antonio y llevaba a sus cachorritos, los cuales no veían, entonces Antonio los cuidó y estuvo con ellos y se recuperaron. Esta hembra de jabalí quedó muy agradecida y acompañaba a Antonio en todo momento, en todo lugar, y a veces le llevaba cosas para comer, y es por eso que a San Antonio Abad se le representa con un puerquito o jabalí a un lado de sus pies”, dijo el sacerdote.
Por varios años, en la parroquia de Santiago Apóstol de Tlatelolco, ubicada en la Plaza de las Tres Culturas, se ha bendecido a los animales al término de la misa de las 17 horas. Además, este domingo 19 de enero a las 11:00 horas también se realizará, pues algunos dueños no pueden llevar a sus mascotas entre semana. El padre ha sido testigo de cientos de historias donde los dueños demuestran el amor por sus compañeros de vida.
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“Traen una mascotita, una perrita que tiene ya 13 años, ya está muy mayor y se le ven sus ojitos ya azulitos, me dicen sus propietarios que tiene cataratas, o sea ya la edad ya va avanzando, pero les ha acompañado toda la vida. El escuchar estas historias de cómo la gente cuida también a sus criaturas, sus mascotas, a las criaturas de Dios, ellos le dan un cobijo a los humanos y el humano también se preocupa por ellos”, señaló.
Ejemplo de esto es la historia de Ginger, una gallinita de tres años con una enfermedad hepática. Su dueña, vecina de la alcaldía Cuauhtémoc la llevó a bendecir y pedir que sane pronto. Mientras que la creyente María Téllez describe esta bendición como algo lindo, por lo que lleva a su perrita Mía cada año:
“Están siempre al cuidado de nosotros, los perros son guías espirituales de los seres humanos, por lo cual reciben más a fondo a Jesucristo en su corazón. Mucha gente no cree en esas cosas como tal, pero es una bendición porque ellos son nuestros guardianes, ellos son la luz del camino que Dios nos dio”, afirmó a este medio.
Irene Gutiérrez, vecina de Tlatelolco llevó a todas las perritas que ha rescatado y esterilizado, desde Kitty, Pelusa, Canela y Mila. Con sus correas, todas fueron bendecidas en dicha parroquia y se quedaron en los alrededores para su paseo nocturno.
El fray Eduardo Jímenez recordó que San Francisco decía que “todos somos hijos del mismo Dios, todos somos criaturas de Dios”. Del mismo modo, dijo, “San Francisco daba gracias a Dios por los animales, por el sol, la luna, por la madre tierra, esa es una enseñanza, poder amar los animales, porque ellos también son parte de la gran obra del Señor”.
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