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La esquizofrenia es una enfermedad cerebral compleja que afecta algunas de las funciones que rigen el pensamiento, las emociones, la conducta y la percepción. Aunque su prevalencia es baja (1% de la población mundial), es una de las condiciones más discapacitantes, puesto que aparece durante la adolescencia, una de las etapas más productivas de la vida, afirmó Raúl Escamilla, especialista de la UNAM.
El jefe de Subespecialidades en el Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente subrayó que “la esquizofrenia comúnmente se asocia a pacientes violentos, pero si están controlados y medicados, no tienen por qué serlo”. Él estuvo en el auditorio Ramón de la Fuente, del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina.
“Quienes sufren esquizofrenia pierden contacto con la realidad. Este trastorno es inherente a problemas mentales y a algunas condiciones médicas, y la mejor manera de ayudar es informar a la población sobre esta condición para evitar su estigma”, indicó.
Escamilla explicó que la pérdida de contacto con la realidad puede involucrar alteraciones en la sensopercepción, mejor conocidas como alucinaciones o distorsiones.
Las más comunes son las auditivas: voces, murmullos o sonidos esporádicos (la mayoría descalifican al enfermo), pero también puede haber alucinaciones visuales, olfativas, táctiles o somáticas.
De la distorsión a través de las percepciones, el afectado tiene alucinaciones que sostiene de forma tenaz, como los delirios de persecución y de grandeza. La esquizofrenia se acompaña de “síntomas negativos” como desinterés general, que puede confundirse con depresión, pérdida de la capacidad para disfrutar las cosas, falta de iniciativa, poca socialización y aislamiento.Otros síntomas que se han caracterizado más recientemente son los relacionados con la cognición, con las funciones mentales superiores, como atención, concentración, abstracción, planeación y memoria. Estos, junto con los “síntomas negativos”, dificultan el tratamiento, en consecuencia, los enfermos tienen un nivel pobre de funcionamiento, finalizó el académico.