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Desde que inició el año, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (
) ha rescatado a un mono, una aguililla, un tigrillo y un león. Estos ejemplares de vida silvestre fueron incautados en Guerrero, Chiapas, San Luis Potosí y Puebla.
El rescate más reciente ocurrió el 3 de febrero en un domicilio particular ubicado en Puebla. Después de un cateo, la fiscalía general del estado solicitó apoyo de la Profepa para el resguardo de un león. Este ejemplar fue hallado con diversas lesiones, por lo cual continúa bajo observación médica.
Por otro lado, en Chiapas, el organismo recibió una denuncia ciudadana para la recuperación de una cría de mono saraguato el 29 de enero. En este caso, la Profepa colaboró con autoridades estatales, quienes procurarán el desarrollo del primate para determinar su destino final.
Ese mismo día, la policía municipal de Calvillo, en San Luis Potosí, alertó a la autoridad medio ambiental acerca de una aguililla que les fue entregada. El ave tenía una herida de bala en una de sus alas, por lo que recibió atención médica. Este ejemplar fue trasladado a una Unidad de Conservación y Manejo de Vida Silvestre (UMA) para continuar su rehabilitación y posterior reintegración a su hábitat.
Previamente, el 28 de enero, la procuraduría en el estado de Guerrero recibió el reporte de un tigrillo adulto que no podía salir de un estanque en el municipio de Petatlán. Dado que el felino sólo presentaba estrés, la indicación médica fue liberarlo en su hábitat natural. Profepa, junto con el 75 Batallón de Infantería, puso en libertad al ejemplar en Zihuatanejo de Azueta.
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