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El 2020 no ha sido un buen inicio de año para el Ejército y la Guardia Nacional (GN), instituciones que han perdido a ocho y cinco elementos, respectivamente, durante enero pasado en diferentes acciones en cumplimiento de su deber.
En los primeros días del mes pasado, dos elementos de la Guardia Nacional fallecieron al ser agredidos por un grupo armado mientras realizaban tareas de vigilancia en la carretera Chihuahua-Ojinaga.
Posteriormente, el 14 de enero, un cabo de caballería que se encontraba de apoyo en la Guardia Nacional y tres guardias murieron en un accidente mientras realizaban tareas de vigilancia sobre los márgenes del Río Bravo, en la ciudad de Reynosa, Tamaulipas.
En un primer momento se manejó que el accidente había sido derivado de un enfrentamiento con el crimen organizado; sin embargo, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional aclararon conjuntamente que se trató de un accidente ocurrido cuando el personal se trasladaba a poner a disposición del Ministerio Público Federal tres armas largas.
Indicaron que durante el viaje, uno de los tripulantes reacomodó las armas en la parte trasera del vehículo, pero una de ellas se accionó de manera accidental e hirió al conductor de la unidad, motivo por el cual éste perdió el control del automotor, que se precipitó hacia un canal de riego.
La Sedena despidió con honores a los elementos fallecidos, en una ceremonia en las instalaciones del 19 Regimiento de Caballería Motorizada, ubicada en Reynosa, Tamaulipas. El evento fue presidido por el comandante de la Octava Zona Militar. Los cuerpos de los fallecidos fueron llevados a sus ciudades natales.
El 22 de enero, un teniente de Infantería, que perteneció al 91 Batallón, con sede en Copalar, Chiapas, murió al volcarse el Humvee en el que viajaba, en el tramo Buenavista-Guayamusej, en el municipio de La Independencia.
En la unidad también viajaban cuatro militares. El teniente perdió la vida al sufrir lesiones graves, de acuerdo con información de la Defensa Nacional.
El pasado lunes, luego de asegurar una aeronave que transportaba cocaína y armamento, en Chetumal, Quintana Roo, un elemento de tropa falleció y un general y dos elementos más resultaron heridos durante un enfrentamiento con presuntos delincuentes que transportaban la droga.
De acuerdo con la Sedena, los hechos ocurrieron cuando fue detectado el ingreso ilícito de un avión bimotor al espacio aéreo mexicano, procedente de Sudamérica, por lo que de inmediato se desplegaron fuerzas de reacción terrestres, lo que logró ubicar el lugar del aterrizaje de la nave al noroeste de Chetumal.
Cuando el personal militar arribó al lugar, fueron agredidos con disparos de armas de fuego por individuos que custodiaban la aeronave. Dos presuntos implicados fueron detenidos, a los que se les aseguró un arma calibre 50, por lo que fueron puestos a disposición de las autoridades.
El pasado 28 de enero, cinco militares del Sexto Regimiento de Caballería Motorizada, en Loma Bonita, Oaxaca, fallecieron en el cumplimiento de su deber, al sufrir un accidente automovilístico mientras se trasladaban a realizar actividades de adiestramiento, en la localidad de Ixtlán de Juárez, Oaxaca.
Cabe destacar que sólo entre enero y agosto de 2019 se contabilizaron 11 militares caídos durante la Campaña Permanente contra el Narcotráfico, la misma cantidad registrada en todo 2018.
Un coronel de infantería, un teniente coronel, dos tenientes, cuatro cabos y tres soldados integraban la lista de militares caídos en el cumplimiento de su deber de enero al 24 de agosto de 2019, en los estados de Tamaulipas, Michoacán, Sinaloa, Nuevo León y Guanajuato, según el conteo del personal fallecido en acciones antinarco de la Sedena.
De ese grupo de militares, el último caso fue el del coronel de Infantería, Víctor Manuel Maldonado Celis, quien al parecer fue emboscado por un grupo armado cuando circulaba el sábado sobre la carretera en el municipio de Ziracuaretiro, cercano a Uruapan, Michoacán, donde Los Viagras y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) mantienen una guerra por el control de las actividades ilícitas en esa región aguacatera.
El mando fungió como comandante del Décimo Cuarto Cuerpo de Caballería de Defensas Rurales, con sede en la alcaldía de Zacapu, Michoacán; así como del Segundo Batallón de Infantería en Cuauhtémoc, Chihuahua, éste último cargo en 2016. Es el segundo militar de rango asesinado en Michoacán en 2019.
El 10 de agosto pasado EL UNIVERSAL informó que el teniente de Infantería Carlos Anastacio Juan, perteneciente a la Guardia Nacional, fue abatido durante un enfrentamiento con un grupo criminal en Yuriria, Guanajuato.
Era originario de Oaxaca y se desempeñaba como comandante operativo de la Guardia Nacional. Es el primer guardia caído en cumplimiento de su deber.
En un enfrentamiento en febrero de 2019, entre el Ejército e integrantes de Los Viagras, en Buenavista Tomatlán, alcaldía de la Tierra Caliente michoacana, cayó abatido el teniente coronel Jorge Guadalupe Barrientos, quien se desempeñó como segundo comandante del 30 Batallón de Infantería, con sede en la ciudad de Apatzingán, donde se encuentra la 43 Zona Militar.
Por el enfrentamiento en el que murió el militar se detuvo a cuatro presuntos sicarios; sin embargo, fueron liberados por un juez federal, quien determinó inconsistencias en la acusación de la Fiscalía General de Justicia de Michoacán.
