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El secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Javier Jiménez Espriú, dijo que será hasta el primer trimestre de 2020 cuando se conozca el resultado de las investigaciones sobre el accidente aéreo registrado el 24 de diciembre de 2018 en el que murieron la entonces gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso, y su esposo, Rafael Moreno Valle.
En conferencia de prensa, el titular de la SCT indicó que no existe ninguna prueba técnica pendiente por realizar y que la comisión de investigación se reunirá para analizar los resultados de todas las pruebas de laboratorio realizadas a los restos de la aeronave.
“No hay ninguna prueba pendiente por realizar. Ya quedaron concluidas todas las de laboratorio. Los integrantes de la comisión las analizarán junto con la bitácora de vuelo, pero toda la información está recabada”, agregó.
En la investigación participaron la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC); expertos en investigación de accidentes aéreos de la Transportation Safety Board (TSB), de Canadá; la Agenzia Nazionale per la Sicurezza del Volo (ANSV), de Italia; la National Transportation Safety Board (NTSB), de Estados Unidos, y la European Union Aviation Safety Agency (EASA), de Europa.
Según Jiménez Espriú, todas estas agencias han colaborado en los últimos 12 meses para revisar cada una de las partes del helicóptero.
El funcionario reiteró que en el caso quedó completamente descartada la posibilidad de que se hubiera tratado de un atentado contra la exgobernadora y su esposo, debido a que no fueron hallados rastros de disparos o detonaciones con cualquier arma de fuego contra la aeronave, así como explosivos.
Explicó que, de hallarse que dolosamente se provocó mediante la manipulación del helicóptero el desplome del mismo, entonces se estará en posibilidad de volver a la teoría de un atentado.
Añadió que, conforme a las conclusiones del dictamen, será posible establecer si la empresa dueña del helicóptero, que funcionaba como taxi aéreo, fue responsable o incluso si se trató de algún error humano por parte del piloto.
El 24 de diciembre de 2018, la exgobernadora de Puebla Martha Erika Alonso y su esposo, Rafael Moreno Valle, abordaron un helicóptero marca Augusta A109S en dicha entidad con rumbo a la Ciudad de México.
La aeronave no era oficial, sino que se trató de un taxi aéreo que minutos después de despegar perdió comunicación con la torre de control y se desplomó de cabeza en las inmediaciones del rancho San Carlos en Tlaltenango, Puebla.
