En el lavadero de una vecindad alejada de sus pretensiones fifís, el programa youtubero (Ojo: youtubero. No se confunda con tubos y otros aparatos habituales del oficio de bailar desnudo) arrancó con las declaraciones de la modelo Celia Lora a la comunicadora digital.
Celia Lora: —Ash, pues te manda saludar mi amigo piloto, el que quiere contigo.
Adela Micha: —¡Jua jua jua! Pues lo hubieras traído de una vez.
CL: —No pudo. Está volando con el Presidente y le dije: “Hazle al kawasaki, digo, al kamikaze”.
AM: —¡Jua jua jua jua! ¿A dónde volaron?
CL: —Ash, ojalá lo lleve a su rancho de Chiapas.
AM: —Fuertes declaraciones. ¿Cómo le haces?
CL: —Es que papi siempre me saca del bote. Mañana dirá que fue un chascarrillo de mal gusto y que le va a componer una rola al del rancho.
AM: —¡Jua jua jua! Háblanos de tu carrera en el cine porno. ¿Cuánto pagan? ¿Qué se siente?
