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Washington.— El abogado Eduardo Balarezo oficializó su salida del equipo de defensa de Joaquín El Chapo Guzmán Loera, insinuando que el despido por parte del sinaloense lo agarró por sorpresa.
El pasado sábado, el capo pidió al juez de la causa contra él en Estados Unidos, Brian Cogan, que le permitiera deshacerse de los servicios del abogado sin dar ninguna explicación: “Escribo a la corte para pedir que despida a Eduardo Balarezo como uno de mis abogados”.
Balarezo, en una carta dirigida a la corte federal del Distrito Este de Nueva York, señaló: “El señor Guzmán nunca había expresado su insatisfacción con mi [trabajo]”.
Tras enterarse de la intención de El Chapo, el abogado se reunió con su cliente y “[en] mutuo acuerdo llegaron a la decisión” de que debía abandonar el caso.
“Fue un placer representar al señor Guzmán. Le deseo lo mejor”, concluye Balarezo. Minutos después, el juez Cogan autorizó su salida del caso.
El abogado de origen ecuatoriano era quien más tiempo llevaba trabajando con el capo. Las pláticas para representar al sinaloense iniciaron a las pocas semanas de la extradición a Estados Unidos, y en septiembre de 2017 se convirtió en su defensor oficial, sustituyendo a los letrados de oficio que hasta entonces lo habían representado.
Balarezo defendió a Guzmán Loera durante un año, ocho meses y tres días, siendo el único abogado que podía comunicarse fluidamente con su cliente, pues sólo él era hispanohablante en el equipo.
La salida del ecuatoriano deja al equipo de defensa de Guzmán con siete abogados, capitaneados ahora por William Purpura, Jeffrey Lichtman y Marc Fernich.
Este último fue fichado para la fase de apelación al veredicto, pues argumentó que el descubrimiento de que miembros del jurado que declararon culpable [a Guzmán Loera] de 10 delitos ligados al narcotráfico incumplieron la normativa establecida, ya que se informaron del proceso judicial con los medios de comunicación.
El escándalo se reveló tras la publicación de una entrevista de Vice News a un supuesto miembro del jurado, en la que éste confesaba que junto a otros leía regularmente sobre el caso, incluyendo versiones de que Guzmán Loera drogaba y violaba a menores de edad.
La defensa tiene hasta el día 29 de mayo para presentar sus argumentos y exigir la repetición del juicio, después de que la fiscalía presentara un documento de casi 100 páginas en el que rechazan la petición de anulación del proceso y que El Chapo tenga derecho a un nuevo juicio.
Por el momento, la fecha de sentencia sigue establecida para el 25 de junio en la corte federal del distrito este de Nueva York, en Brooklyn. Si no hay inconvenientes, El Chapo será condenado a cadena perpetua, la que cumpliría, probablemente, en la cárcel de máxima seguridad de Florence (Colorado).
