Más Información
A 6 días de toma de Trump, De la Fuente negocia con equipo republicano sobre aranceles; “tenemos que llegar a acuerdos”, dice
Por violencia o migración, INE perfila zonas de atención para elección judicial; falta determinar total de casillas
Aspirantes a elección judicial confían en proceso de selección de candidaturas; “no habrá recomendados”, expresan
Buscadoras, activistas y periodistas piden reunión con Sheinbaum; denuncian desplazamiento y hasta feminicidio por su labor
Activista trans interrumpe discurso de la nueva fiscal de CDMX, Bertha Alcalde; pide justicia por transfeminicidios
nacion@eluniversal.com.mx
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que cumplirá con la encomienda que le dio Rosario Ibarra de Piedra, quien le pidió custodiar la Medalla Belisario Domínguez hasta que encuentre a los desaparecidos y haya justicia para sus familias.
“Es una responsabilidad que voy a cumplir. Voy a hacer todo lo que humanamente me sea posible para dar con los desaparecidos”, aseguró al término de la sesión solemne en la que el Senado entregó el galardón a la activista social.
En breve entrevista en la antigua Casona de Xicoténcatl, el Titular del Ejecutivo federal dijo que él es libre y no habrá grupos de interés que impidan conocer la verdad sobre las desapariciones cometidas en los gobiernos autoritarios.
“[A Rosario Ibarra] le mando un abrazo cariñoso y sabré cumplir con su encomienda”, señaló.
Antes, en su conferencia de prensa matutina, López Obrador celebró que el Senado haya otorgado la medalla a la activista Rosario Ibarra de Piedra, porque es un “ejemplo mundial de congruencia y de lucha” en búsqueda de personas desaparecidas.
“Ella es un símbolo de lucha por los desaparecidos, por los que fueron reprimidos en los tiempos del Estado autoritario. Es una mujer única, ejemplar, no sólo en México, sino mundial”, aseguró.
El Presidente expresó todo su “amor, mi cariño, toda mi admiración” a Ibarra de Piedra.
Además, reveló que cuando la activista fue candidata a la Presidencia de la República en 1988, a pesar de que en su casa había simpatías por el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas “y las sigue habiendo”, su madre votó por ella.
Señaló que la exsenadora tiene muy merecida la Medalla Belisario Domínguez y que sea ahora, cuando el Senado hizo este reconocimiento a su trayectoria, es un hecho importante porque “está enfermita, y le deseamos que se recupere, pero qué bien que se tomó esa decisión”.