Francisco I. Madero, Coah.— Ayer, la explanada municipal de Francisco I. Madero se pintó de guinda. Casi cinco mil morenistas se dieron cita en ese lugar para advertir que en 2023 su partido le arrebatará al PRI ese estado, uno de sus tres últimos bastiones electorales.

Desde el aeropuerto de Torreón hasta el municipio de Francisco I. Madero fueron colocadas más de una treintena de mantas sobre la carretera y en puentes peatonales. Tenían la foto del secretario de Gobernación y leyendas como “Bienvenido, Adán Augusto”, “Adán va” y “Coahuila te da la bienvenida, Adán Augusto”.

También se observaron algunas pintas en paredes con la leyenda “Te AMLO, Claudia” y “Para que siga la transformación, es Claudia”. En contraste, casi no se observaron mantas en favor de Ricardo Monreal ni de Marcelo Ebrard.

La llamada “asamblea informativa” de Morena, programada a las 11:30 horas, inició a las 12:45. Los presidenciables Claudia Sheinbaum Pardo, Adán Augusto López Hernández y Ricardo Monreal Ávila fueron recibidos entre abrazos, aplausos, matracas y gritos de “¡Preeeesidenta!” y “¡Preeeesidente!”.

La marea guinda dejaba sentir su fuerza a un año de la elección estatal donde se renovará la gubernatura que actualmente está en manos del priista Miguel Ángel Riquelme. Se sentía la fuerza, la presencia de quienes encabezan las encuestas en la región de La Laguna.

En esta ocasión, el aplausómetro lo ganó la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, pues casi la mitad de los asistentes eran simpatizantes de ella.

Casi parecía una copia del mitin de hace dos semanas en Toluca, Estado de México; la única diferencia es que ahora sí estuvo invitado Monreal Ávila, pero se percibía la animadversión.

El líder de los senadores reclamaba su derecho de piso y era claro: “Nos vamos a mantener en Morena, vamos a luchar en Morena, vamos a luchar a la buena porque somos fundadores de Morena”. Durante su discurso, ni Mario Delgado ni nadie de los presentes en el templete aplaudió a Monreal Ávila, contrario a lo que ocurrió con Sheinbaum, quien fue ovacionada en cinco ocasiones durante un discurso en el que destacó el papel de las mujeres en la política pública y también habló de la unidad.

López Hernández, vestido con una guayabera blanca y pantalón azul, también ofreció un discurso en torno a la unidad en el que advirtió: “No se equivoquen, Morena va a estar unido y Morena va a ganar sin duda”.

En el acto, Américo Villareal, gobernador electo de Tamaulipas, afirmó que en ese estado “la gente decidió que no podía continuar un modelo neoliberal” y mencionó que Coahuila no será la excepción.

De esa forma, el partido guinda mostró su músculo ante la elección que se realizará en 2023 en esa entidad del norte.

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