Para algunos migrantes transitar por México es igual de peligroso que hacerlo por la selva del Darién y países centroamericanos debido a los riesgos en el camino, señala el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
En su Reporte de Monitoreo de Protección en México 2023. El impacto del desplazamiento forzado en la movilidad humana, destaca que mediante encuestas 56% de las personas en condición de movilidad refirió la presencia de organizaciones criminales en Baja California, Chihuahua, Sonora, Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila, así como las dificultades que implica transitar por México sin documentación.
“El aumento y persistencia de estos riesgos de seguridad y protección a lo largo de México ha impactado en la movilidad humana en el país, por lo que cada vez más personas deciden permanecer en el centro de México para esperar su cita para presentarse en los puertos de entrada fronterizos de Estados Unidos”, dice el ACNUR.
Cita que Naciones Unidas, organizaciones civiles y la academia han documentado los enormes peligros que corren las personas al cruzar la selva del Darién entre Colombia y Panamá. Los principales riesgos son robos, asaltos, secuestros, enfermedades, ataques de animales salvajes y accidentes ocasionados por la inclemencia de atravesar una zona llena de ríos y montañas.
Indica que una tercera parte de los encuestados tenía necesidades específicas de protección, al ser madres o cuidadoras solas, sobrevivientes de abusos, personas con condiciones médicas crónicas, mujeres embarazadas o lactantes, con discapacidad y adultas mayores.
En 2023, ACNUR y organizaciones de la sociedad civil realizaron 6 mil 387 entrevistas que recogieron información de 15 mil personas de distintas nacionalidades en Tapachula, Suchiate, Tenosique, Villahermosa, región sur; Ciudad Acuña, Ciudad Juárez, Matamoros, Mexicali, Monterrey, Nogales, Piedras Negras, Reynosa, Saltillo y Tijuana, región norte, y Ciudad de México, Aguascalientes, Guadalajara, Querétaro, Celaya, León, Irapuato y San Luis Potosí, región centro.
El 51% de las personas encuestadas señaló la violencia, la inseguridad y las amenazas como causas principales por las que han abandonado su país de origen. Más de la mitad de mujeres mencionó haber sido víctima de violencia y amenazas.
Por nacionalidad, 71% de las personas haitianas señaló como causa de salida el temor por la situación general de violencia; 69% de las personas hondureñas refirió haber sido víctima de violencia, amenazas e intimidación y 51% de las personas venezolanas destacó la violencia, inseguridad, amenazas e inseguridad como causas de salida.
También 67% de las personas colombianas, 64% de las ecuatorianas y 55% de las nicaragüenses refirieron la violencia, la inseguridad y amenazas como causas de salida.
“Este dato refuerza la posibilidad de que la mayoría de las personas que ingresan a México de manera irregular podrían tener necesidades de protección internacional, por tanto, se debe fortalecer los sistemas de asilo y procedimientos justos y eficientes”, precisa el ACNUR.
Según el reporte, al llegar al país una de cada tres familias necesita apoyo de alojamiento y uno de cada 10 está en riesgo de pernoctar en la calle. Una de cada tres personas no tenía ningún documento expedido por autoridades mexicanas.
Resalta que México continúa siendo un país de tránsito para miles de personas que vienen de una multiplicidad de países. Sin embargo, se ha convertido también en un destino para quienes huyen de la violencia o buscan una vida digna.
“Los perfiles de las personas que llegan al país también están cambiando, con mayor presencia de familias y personas con necesidades específicas, y más de la mitad que han huido de violencia, amenazas y persecución. Las vulnerabilidades se agravan por los riesgos que enfrentan en su camino a México, que incluyen robos, extorsiones o intimidación físicas”, agrega.
Añade que 63% de los encuestados indicó que su país de destino es Estados Unidos, mientras que sólo 26% mencionó a México.