Mojarras desde 80, hasta 210 pesos; filetes para empanizar desde 30 pesos y camarones pre cocidos para cóctel, en 100 pesos la bolsa, son algunas de las ofertas que comerciantes de la Nueva Viga dan a sus clientes este Viernes Santo de cuaresma para “echarles la mano con la crisis económica que dejó la pandemia”.

“Ayer nos persignamos vendiendo la tonelada completa de pescado que le pedimos al proveedor. Nos estamos recuperando de la poca venta que se vino durante la pandemia. Más de 40 compañeros se tuvieron que ir y le cedieron sus lugares a otros, pero afortunadamente nosotros aquí seguimos y nos ha ido muy bien en este inicio de fin de Semana Santa ,” cuenta Heidi Sánchez a EL UNIVERSAL .

Sin cubrebocas, cientos de capitalinos se acercan a los puestos a comprar “pulpo, ostiones, sierra, callo y camarón por ser los más populares ingredientes para preparar ceviche” según la señora Sánchez.

En los locales, vendedores aún conservan las medidas sanitarias exigidas por la Secretaría de Salud, pero entre los clientes ya no existe la sana distancia. Entre empujones, las amas de casa buscan los mejores precios y los productos más frescos.

A los pasillos del famoso mercado de mariscos han regresado negocios sobre ruedas que ofrecen empanadas de surimi o camarón, cocteles, caldos, filetitos fritos y pescadillas. Cuentan con el servicio de comida para llevar “para quienes todavía le tienen miedo al contacto” y ofrecen gel antibacterial a quienes se quedan a comer ahí.

Durante este fin de semana, el ingreso al mercado de mariscos será únicamente para personas que lleguen a pie o en transporte público, con el objetivo de evitar aglomeraciones como la del año pasado, cuando los capitalinos abarrotaron el área durante la contingencia por Covid-19 .

María Suárez, vino desde Azcapotzalco a comprar mojarras y huachinangos para su familia. “Si usted compra en mercados cercanos a su casa, verá cómo le aumentan unos 30 o 50 pesos, entonces, acá me alcanza para nueve mojarras y allá para siete. Hay calidad y precio,” asegura.

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Los comerciantes invitan a los consumidores de productos marinos a asistir a la Nueva Viga en esta temporada de cuaresma en un horario de 3 de la mañana a 6 de la tarde, de lunes a domingo.

“Pero que vengan toda la semana, todo el año, porque todos los días tenemos buen producto, pescado en aguas nacionales, directito de la Baja California a su mesa. Mire, píquele el ojito, está bien fresco,” pide el vendedor Pepe Domínguez.

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