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Érick Velázquez es un número más en las deportaciones que Estados Unidos hace de mexicanos. Tras 11 años de vivir en Seattle, Washington, hace 11 meses tuvo el infortunio de estar en un centro comercial en el momento en que se llevó a cabo una redada.
Con 25 años, Érick dejó esposa y dos hijos. Llegó a la Ciudad de México sin saber qué hacer.
“El sueño americano también está en México”, afirma, pues luego de tanto buscar logró dar con la organización civil New Comienzos que dirige Israel Concha, quien lo conectó con la recién creada empresa M&T Global Sanitización y Desinfección, en la que hoy labora.
M&T Global fue creada por Pablo Ulises Mendieta, otro mexicano deportado en 2006 y que hoy ha creado sus propios negocios y comienza a dar oportunidades de trabajo a mexicanos que son repatriados desde Estados Unidos.
El padre de Érick emigró primero y un par de años después se llevó a su familia. El joven tenía tres años cuando llegó a Seattle y vivió como muchos otros mexicanos: irregular. Aprendió inglés y hoy es bilingüe.
“Hace 10 meses estaba en Estados Unidos, en Seattle. Era un día normal y me fui al mall (centro comercial). Al salir de una de las tiendas, vemos mis amigos y yo que había mucha gente hispana corriendo y entonces vimos que había una redada. Quisimos correr, pero cuando vimos ya nos habían detenido”, relata el joven a EL UNIVERSAL.
