Más Información
Secuestran y asesinan a delegado de Unión Regional Ganadera en Sinaloa; su cuerpo presenta huellas de tortura
VIDEO: “¡Qué violenta!”, grita Noroña a senadoras; Jucopo ordenó retirar mampara del Senado lo que provocó jaloneos
Trump desgina a Elon Musk al frente del "Departamento de Eficiencia Gubernamental"; buscará eliminar regulaciones excesivas
Primero fue Juan Collado , luego Rosario Robles y ahora Carlos Ahumada , tres detenidos por diferentes causas y los tres relacionados en la misma trama de los videoescándalos de 2004.
El abogado Juan Collado fue detenido el 9 de julio en un restaurante de lujo acusado de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada. Sigue su proceso en prisión.
Rosario Robles apenas el lunes pasado fue puesta en prisión preventiva en tanto su acusación de ejercicio indebido del servicio público se resuelve. El riesgo de fuga fue causa suficiente para el juez de control para dictar la medida.
Se acusa a Robles de provocar daño al erario por 5 mil millones de pesos relacionados con los desvíos de recursos del esquema llamado "Estafa Maestra".
Este viernes, en Argentina, Carlos Ahumada fue detenido acusado de defraudar un millón 472 mil pesos en ISR.
Si bien las causas son diferentes, los tres comparten un papel en la llamada trama de los videoescándalos.
En diciembre de 2000 López Obrador, entonces miembro del PRD, ganó la elección como Jefe de Gobierno y sucedió en el cargo a Rosario Robles, también perredista, quien llegó al cargo en 1999 en sustitución de Cuauhtémoc Cárdenas.
En marzo de 2004, René Bejarano, perredista, en aquellos días coordinador de la bancada del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, y uno de los principales operadores de López Obrador, fue exhibido en televisión recibiendo fajos de billetes de manos del empresario de origen argentino y naturalizado mexicano Carlos Ahumada, quien era pareja sentimental de Rosario Robles.
Juan Collado es identificado, según el propio Ahumada, como pieza clave en la distribución de las videograbaciones, que a decir de Ahumada, le fueron compradas en 68 millones de pesos por el expresidente Carlos Salinas de Gortari y del panista Diego Fernández de Cevallos.
La difusión de esos videos generó una imagen negativa que terminó por impactar en la contienda electoral presidencial. AMLO perdió la elección por una mínima diferencia y reclamó, sin éxito, fraude electoral.
ml