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Ante la crisis de violencia “sin precedente e insostenible” que vive el país, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) impulsará acciones colectivas para la construcción de la paz.
En rueda de prensa encabezada por monseñor Ramón Castro, secretario general de la CEM, se presentó la Agenda Nacional de Paz, resultado de más de mil conversatorios en 22 estados, en la que propone una ruta de acciones en cuatro temas centrales: tejido social, seguridad, justicia y sistema penitenciario.
El prelado destacó que el documento está dirigido a todos los mexicanos y en particular será presentado a las candidatas presidenciales y a todos los aspirantes a gubernaturas y alcaldías, además de que se buscará que lo conozca el presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque él tenga “otros datos”.
“Sabemos esa realidad de que puede haber otros datos, pero queremos compartir esto”, señaló.
¿Buscarán al presidente López Obrador?, se le preguntó.
“¿Por qué no?, si se puede ciertamente se buscaría y se trataría de dialogar. El diálogo y los puentes son siempre parte de nuestra naturaleza”, respondió.
Destacó que la Agenda Nacional de Paz propone un cambio esencial en la conciencia colectiva, “alejándonos de una cultura de violencia para abrazar una cultura de cuidado que reafirme el valor de la vida, la dignidad humana, la fraternidad, la causa común.
“El documento parte de un diagnóstico. (…) Estamos convencidos de que la indiferencia, el miedo y la violencia no constituyen nuestro destino, sino una etapa sombría de nuestra historia que podremos superar mediante la oración, colaboración la corresponsabilidad y el esfuerzo común”, expresó.
La secretaria ejecutiva de la Dimensión Episcopal para los Laicos, Denisse Arana, destacó que el texto propone abandonar los enfoques punitivos y reactivos para priorizar la justicia restaurativa y soluciones alternativas a los conflictos.
El padre Marco Hernán Quezada, delegado de Formación y Juventud y Vocaciones de la Compañía de Jesús, dijo que se trata de llamar “a los distintos órdenes de gobierno, a las candidaturas políticas, universidades, organizaciones de la sociedad civil, empresarios, asociaciones religiosas y a toda persona de buena voluntad, para unirse a las siete acciones que consideramos clave para la paz en México:
“1. Sistematizar, fortalecer y compartir las buenas prácticas que han demostrado ser eficaces en áreas críticas como seguridad, justicia y desarrollo social.
“2. Mesas técnicas dedicadas a influir en políticas públicas que aborden aspectos fundamentales como el tejido social, la seguridad, la justicia y el sistema penitenciario.
“3. Impulsar la Agenda Nacional de Paz en colaboración con actores políticos a nivel nacional, estatal y local, incluyendo aquellos que compiten por cargos públicos.
“4. Incorporar a las universidades públicas y privadas en la revisión de programas sociales y planes de desarrollo, alentando la formación de capacidades locales y generando propuestas para reducir la violencia y promover la paz.
“5. Atender los factores de riesgo que afectan a los adolescentes desde las escuelas secundarias y sus entornos familiares y comunitarios.
“6. Promover nuevas formas de gobernanza con una participación ciudadana amplia, asegurando que nuestras autoridades estén profundamente comprometidas con la paz en sus territorios.
“7. Exigir coordinación efectiva de las fuerzas de seguridad e implementación de estrategias coherentes para vivir en paz”.
