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alberto.morales@eluniversal.com.mx
Oaxaca, Oax.— Luego de expresar su respaldo a la decisión del gabinete de seguridad de dejar en libertad a Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que no puede valer más la captura de un delincuente que las vidas de las personas.
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“[Los del gabinete de seguridad] tomaron decisiones que respaldo, avalo, porque la situación se tornó muy difícil y estaban en riesgo muchos ciudadanos”, dijo.
En su conferencia de prensa matutina, en la Base Militar No. 15 de esta ciudad y acompañado por el gobernador Alejandro Murat (PRI), el Presidente rechazó que esta decisión debilite a su gobierno.
“No queremos muertos ni la guerra, eso le cuesta trabajo entenderlo a muchos, pero la estrategia que se implementaba convirtió al país en un cementerio”, indicó.
Con un bastón de mando —símbolo de autoridad entre los pueblos indígenas— entre sus manos, el Titular del Ejecutivo federal consideró que es una exageración decir que ha fracasado su estrategia contra la delincuencia, luego de la captura y liberación del presunto narcotraficante.
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“Lo de ayer [jueves] fue lamentable, pero se me hace una exageración decir que ha fracasado nuestra estrategia. Eso es lo que quisieran los conservadores, se frotan las manos, andan como desquiciados buscando que fracasemos, pero no”, agregó.
Al ser cuestionado de que en 2015, tras la fuga del Chapo Guzmán pidió como opositor la renuncia del gabinete de seguridad, López Obrador respondió que en este caso no es lo mismo.
