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Mañana se reanudará la audiencia intermedia del proceso judicial contra Rosario Robles Berlanga, por el delito de uso indebido del servicio público, luego de que ayer el juez federal Ganther Alejandro Villar Ceballos decretó un receso, tras siete horas de diligencias sobre el desahogo de los datos de prueba entre la FGR y la defensa.
Durante la audiencia del sábado, tanto la Fiscalía General de la República (FGR) como la Auditoría Superior de la Federación (ASF) concluyeron la depuración de más de 300 pruebas contra Robles, entre testimonios y documentos, cuya mayoría fueron avaladas por el juzgado.
A su vez, el abogado de la exsecretaria de Desarrollo Social, Epigmenio Mendieta Valdés, inició su turno en la discusión sobre la idoneidad de más de 50 datos de prueba con las que cuenta para defender a su clienta de presuntas omisiones en el desvió de más de 5 mil millones de pesos, en el caso de la Estafa Maestra.
Al salir del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Sur, el litigante comentó que al momento el juez Villar les ha aceptado 25 o 30 medios de prueba.
“En la mayor parte de los documentos están pendientes ocho testigos por debatir, de tal manera que es una gran cantidad de información la que debemos incorporar a través de esos testigos. Llevamos tres testimoniales y documentos”, indicó.
Mendieta adelantó que en la audiencia de mañana se debatirá lo relacionado con la reparación del daño por más de 5 mil millones de peso.
Al cuestionarlo si percibe desventaja ante la cantidad de pruebas avaladas a la FGR para el juicio oral, el abogado de Robles respondió que le parece bien el equilibrio.
“Ellos [la FGR y la ASF] tienen la obligación de probar, me parece que es perfecto el equilibrio, ellos tienen la obligación de probar y nosotros solamente defendernos”, agregó.
