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Zacualtipán, Hgo.— En la tierra del general Felipe Ángeles, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que el gobierno federal —al que ha comparado con un elefante reumático, terco y mañoso— “ya está de pie”, por lo que llamó a trabajar en unidad para empujarlo y que las cosas marchen bien.
“La política es asunto de todos y yo necesito de todos ustedes, que me ayuden, porque recibimos un elefante echado, reumático, mañoso, ya logramos pararlo, pero falta empujarlo para que camine y eso cuesta trabajo”.
Durante su visita número 55 a un hospital rural del IMSS, el presidente López Obrador reconoció que como titular del Ejecutivo federal toma decisiones, pero a veces pasa el tiempo y no se llevan a cabo las ordenes que él da.
“Se acata, pero no se cumple, entonces hay que estar diario, diario. A mí me ayuda que soy un poco terco y no me doy por vencido a la primera, pero todos tenemos que ayudar a que las cosas marchen bien”.
En este nosocomio, en el corazón de la sierra hidalguense —que es la única opción para más de 100 mil habitantes de 14 municipios de alta marginación de Hidalgo y Veracruz, el Presidente realizó un recorrido y conoció las carencias y necesidades de la comunidad.
Por ello, el Mandatario evocó al general Felipe Ángeles, un revolucionario místico y humanista, y se comprometió a no fallarle al país ni a los hidalguenses.
Es más, dijo, cuando se venda el avión presidencial, que costó más de 7 mil millones de pesos, equivalente a 350 años del presupuesto que recibe Zacualtipán, parte de sus recursos servirán para resolver el problema del abasto de agua en la zona.
El gobernador Omar Fayad (PRI) respaldó al Presidente en su lucha contra la corrupción y se comprometió a que su administración no contratará ninguna empresas distribuidora de medicamentos que sea boletinada por el gobierno federal.
“Duele la violencia”. López Obrador aseguró que todas las mañanas cuando tiene la reunión con su equipo de seguridad, le duele conocer las cifras de violencia en el país, por lo que reconoció que es todavía un pendiente en su gobierno, junto con el crecimiento económico.
Por la mañana, durante con conferencia en Palacio Nacional, reconoció el trabajo que han hecho José Rafael Ojeda, titular de la Secretaría de Marina (Semar), y Luis Cresencio Sandoval, de la Defensa Nacional (Sedena), a quienes señaló de ser incorruptibles y profesionales.
“Me ocupa mucho que logremos pacificar al país, que haya paz, que no haya violencia, me duele mucho, todos los días, el reporte de la mañana, cuando me entero, cuando me informan sobre hechos delictivos en el país, eso es fuerte y ese es un desafío.
“Ya puedo sacar mi pañuelo blanco”. En tanto que, al agitar un pañuelo blanco, el Presidente aseguró que en las altas esferas del gobierno que él encabeza ya no hay corrupción ni impunidad tolerada.
“Ya puedo sacar mi pañuelo blanco, ya no hay corrupción ni impunidad tolerada arriba, es decir, en los niveles más altos del gobierno. Ya empezó a limpiarse el gobierno de corrupción de arriba para abajo, como se limpian las escaleras, y vamos avanzando”, dijo.
El Presidente consideró que es momento de reconciliación, como lo han planteado algunos de sus “adversarios”, puesto que es necesaria la unidad en el país para que haya progreso y bienestar.
“Me gustó mucho un replanteamiento o una actitud muy digna de algunos adversarios, hablando de que era el momento de una reconciliación, yo les tomo la palabra, creo que necesitamos la unidad. Si tenemos el propósito de que progrese el país con justicia, que haya crecimiento con bienestar, que haya justicia con libertades, si coincidimos en eso, en garantizar la libre manifestación de las ideas, el derecho a disentir, el que nunca se piense en el autoritarismo, en la mano dura, ni siquiera en la mano blanda, nada de dictadura, nada de “dictablanda”, sino construir una auténtica democracia. Sobre eso nos entendemos y, desde luego, a partir del respeto a todos”.
En Palacio Nacional afirmó que la vida sería muy aburrida “si pensáramos de la misma manera, democracia es pluralidad, es discrepancia, es debate, pero al mismo tiempo es unidad y es respeto”.