El expresidente Andrés Manuel López Obrador heredó a su sucesora un gobierno con una enorme popularidad y aceptación, pero también unas finanzas públicas en los huesos y un aparato administrativo con una gran precariedad, afirman Leonardo Curzio y Aníbal Gutiérrez, autores del libro El mejor país del mundo… (Grijalvo), en el que hacen un análisis de lo que significa la continuidad del nuevo régimen a través del llamado segundo piso de la Cuarta Transformación.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Curzio, comunicador, académico y analista político, y Gutiérrez, catedrático de la UNAM y experto en economía, señalan que Claudia Sheinbaum encabeza una administración pública disfuncional en la que es falso que se haya desterrado la corrupción, que mantiene intactos sus alicientes.
“López Obrador le dejó a Sheinbaum un país ciertamente con una enorme popularidad del gobierno, una enorme aceptación del gobierno, lo cual es muy valioso en términos políticos, con un aparato propagandístico y emotivo tremendamente funcional, pero al mismo tiempo le lega finanzas públicas en los huesos, y un aparato administrativo tremendamente precarizado.
“Tenemos una Presidenta muy poderosa desde el punto de vista de lo que es el tema simbólico y la popularidad, pero una Presidenta pobre en términos de finanzas públicas y con un corredor muy estrecho que es la vinculación de México a los Estados Unidos para hacer otras transformaciones”, comentó Leonardo Curzio.
“El presidente anterior decidió legarle como cereza del pastel 20 reformas constitucionales, que lo único que hacen hoy es entorpecer la posibilidad de desplegar con mayor amplitud un proyecto nuevo”.
¿Es la presidenta Sheinbaum una calca de AMLO, como afirman sus adversarios?
AG:—Mira, esta Presidenta tiene un legado de una agenda legislativa y por lo tanto una agenda de gobierno, que es lo que se ha visto, y ella lo ha reconocido, que es la continuidad que prometieron desde campaña. Por eso no sorprende o no debería de sorprender, pero por otro lado vemos que intenta distanciarse en términos de la parte de seguridad con alguna de las medidas que ha estado tomando.
LC:—Yo no diría que es una calca, por lo evidente que sigue siendo un dato político muy trascendente: es mujer y el hecho de que una mujer haya llegado a la Presidencia es una cuestión que cambia completamente el patrón tradicional de reclutamiento de la élite política. Viene de una trayectoria diferente, el presidente anterior viene de la matriz priista y era un priista de manual. Ella fue la candidata de un partido nacionalista identitario y es una mujer de origen judío. El rostro de ese partido es un rostro de una mujer europea con doctorado en Estados Unidos, o sea, muy contraria a toda la retórica norteamericana del presidente anterior, que decía que iban a estudiar a Norteamérica para aprender a robar. Decir que Claudia Sheinbaum fue a Stanford a aprender a robar sería mucho decir, por tanto, sí hay muchos elementos para decir que puede hacer una política diferente.
En el tema de seguridad, los autores de El mejor país del mundo… advierten que la estrategia del expresidente López Obrador fue un rotundo fracaso que dejó 200 mil homicidios durante todo su sexenio, y le deja a la presidenta Sheinbaum “un entramado institucional que tiene niveles de impunidad altísimos, y todo lo que se planteó al inicio del sexenio anterior, como por ejemplo combatir al crimen organizado, termina con unas organizaciones criminales con un poder enorme”.
Asimismo, ambos autores coincidieron en que el proceso electoral del Poder Judicial será tan desastroso que la presidenta Claudia Sheinbaum tendrá la oportunidad de dar marcha atrás.
“No hay país en el mundo, no hay economía de mercado, que tenga un Poder Judicial totalmente vinculado a procesos cuya legitimidad sean cuando menos dudosos”.
“¿Cuánta gente va a ir a votar?, imagínate que vote el 12%. ¿Qué legitimidad tiene un poder del Estado así? Por lo tanto, igual que hicieron con muchas otras cosas, tener que aceptar que no fue una buena idea, porque no la es, y tratar de regresar, en el tiempo que le queda a la Presidenta, a un sistema institucional purificado, con controles, con todo lo que tú quieras, pero más canónico, más similar a lo que existe en las democracias occidentales”, señala el doctor Curzio.
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¿Es un lastre para Sheinbaum la herencia que le dejó AMLO en personajes de la administración y en los costos de obras públicas y programas sociales?
LC:—Yo digo que sí, centralmente, y si no un lastre, una herencia que hay que gestionar. La Presidenta tuvo que anunciar 8 mil millones de pesos para restaurar el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, de manera que lo tengamos para la Copa del Mundo. Si tenemos un aeropuerto nuevo, yo me pregunto ¿por qué le tienes que estar metiendo tanto dinero al viejo?
AG:—Tiene otra herencia que incidiría en esa decisión, que es la revocación de mandato. Entonces también es otra de las cuestiones que vienen pensando, de qué va a pasar hacia adelante y si el fundador y organizador de Morena va a seguir influyendo y con toda la legión de puestos que le hereda, tanto en el movimiento como en la administración pública, qué tanto margen tiene para efectivamente hacer un deslinde como el que muchos imaginan. Una ruptura total yo creo que es muy difícil que haya, y ella misma ha declarado que algunas cosas van a continuar.
Sin crecimiento económico serán insostenibles los programas sociales?
LC:—Sí, por supuesto, el modelo que ha sido muy eficaz hasta ahora es que él ha mantenido equilibrio macroeconómico hasta el año el último año de López Obrador donde echaron el dinero para ganar la elección, digámoslo con todas las palabras, y entonces empieza a comprometer en este caso el presupuesto.