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La violencia contra las mujeres ha generado en el país movilizaciones de colectivos en demanda de justicia a las víctimas de feminicidios y para garantizar una vida libre de acoso y hostigamiento sexual.
Casos como el de Ingrid Escamilla, la niña Fátima, Lesvy Berlín, María de Jesús Jaime Zamudio, Yunuén López e Isabel Cabanillas, así como decenas más que se han registrado en el país detonó protestas contra la falta de atención de las autoridades ante el clima de violencia que enfrentan.
Hoy se gesta una gran protesta de cara al Día Internacional de la Mujer, pues el próximo 8 de marzo se ha convocado, a través de redes sociales, a una marcha del Monumento de la Revolución a Palacio Nacional y el 9 de marzo a un paro nacional en el que las mexicanas no realicen actividades laborales, escolares o del hogar.
Luego de una serie de casos en los que la violencia contra la mujer estuvo presente, se detonaron las principales y mayores manifestaciones en repudio.
Una protesta fue el 3 de mayo de 2017, cuando en Ciudad Universitaria se encontró el cuerpo de Lesvy Berlín Osorio en la cabina de un teléfono, con el cable enredado en el cuello y las estudiantes se manifestaron frente a Rectoría.
En febrero de 2019 varias mujeres de la Ciudad de México denunciaron que sufrieron intentos de secuestros, no sólo en las calles, también en el Metro. De esa fecha a agosto, las constantes desapariciones en el país estuvieron marcadas por dos casos en los que la violencia fue a manos de agentes de la policía.
El primer ataque fue en la alcaldía Azcapotzalco, el 6 de agosto, en donde una joven denunció que cuatro oficiales la subieron a una patrulla y abusaron de ella. El segundo se dio el 9 de agosto. Otra denunció que un policía abusó sexualmente de ella en el Museo Archivo de Fotografía.
Estos hechos ocasionaron que las mujeres protestaran, y la mancha más emblemática fue cuando pintaron con diamantina rosa a Jesús Orta, exsecretario de Seguridad de la Ciudad de México, debido a la falta de respuesta contra los policías.
Días más tarde, durante la marcha a favor de la despenalización del aborto se reunieron miles de mujeres para protestar por esta causa, y también por la violencia que las hace sentir amenazadas. En esa ocasión algunas realizaron destrozos y pintas en Reforma.
En el Día de la No Violencia Contra la Mujer, el 25 de noviembre, varios colectivos convocaron a actos para conmemorar la memoria de las víctimas, a las sobrevivientes de violencia y la acción de las defensoras, con actividades como veladas en la antimonumenta, pero en esa ocasión, las cosas se salieron de control, ya que de nueva cuenta hubo destrozos y algunos altercados con policías.
Cuatro días después las mujeres se dieron cita para replicar el performance chileno Un violador en tu camino, que se desarrolló en completo orden, sin pintas.
Este año, ante las desapariciones, asesinatos y agresiones contra mujeres, salieron a las calles a pedir justicia. Los casos de Yunuén López e Isabel Cabanillas, que eran activistas feministas y fueron encontradas sin vida en Ciudad Juárez y Morelia detonaron protestas el 25 de enero.
Unas semanas después, el feminicidio de Ingrid Escamilla alarmó al país. El trato que dio el gobierno federal al tema provocó que organizaciones de mujeres se manifestaron en las puertas de Palacio Nacional, en las que quemaron cachitos de lotería y realizaron pintas.
