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Los gobiernos de México y Estados Unidos sostuvieron un diálogo de alto nivel en el que acordaron fortalecer la colaboración para combatir el comercio ilegal de armas, así como bloquear el tráfico de drogas y personas.
En el marco del primer año del Entendimiento Bicentenario, funcionarios de seguridad y justicia tuvieron una reunión en Washington D.C. encabezada por el canciller Marcelo Ebrard y el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.
Al respecto, Ebrard anunció la creación de un grupo de trabajo entre México y EU para combatir el tráfico de armas.
Explicó que se proponen medidas a corto plazo como regulaciones, revisión de fronteras para lograr decomisos, entre otras. “Sí creo que estas acciones nos puedan permitir para el año entrante un resultado superior al que ya logramos este primer año”, dijo.
Detalló que desde 2020 se han asegurado más de 55 mil armas, de las cuales más de 32 mil fueron antes de la comisión de delitos.
Expuso que ha trabajado con el secretario de Seguridad de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, con apoyo de Blinken para crear un mapa sobre el tráfico de armamentos a México.
“En la frontera tenemos más número de armas porque podemos vigilar qué pasa. Y este es un mapa que hemos elaborado con las autoridades de Estados Unidos sobre quién las vende; son 10 condados de Estados Unidos”.
Cuestionado sobre qué se puede hacer para solucionar el problema de las armas, tras la respuesta de Ebrard, Mayorkas dijo: “Como ha señalado el secretario Ebrard, hemos acordado crear un grupo de trabajo para desarrollar nuevas estrategias con el fin de examinar nuestros protocolos de interdicción, dar seguimiento a la investigación y el enjuiciamiento de los casos, y evaluar y determinar qué más podemos hacer para contrarrestar este problema”, explicó.
De acuerdo con Blinken, hay dos prioridades en materia de seguridad: el combate al fentanilo y el tráfico de armas.
Blinken recordó que el presidente Joe Biden firmó la Ley Bipartidista de Comunidades más Seguras, la “primera legislación importante sobre seguridad de las armas en Estados Unidos en casi 30 años, y convierte las compras de paja y el tráfico de armas de fuego en un delito federal, y que hemos utilizado para responsabilizar a los traficantes”.
Sin embargo, reconoció que las medidas son insuficientes. “Tenemos que intensificar nuestros esfuerzos para desbaratar la producción y el tráfico de fentanilo y opioides sintéticos en general”.
Ebrard afirmó que la participación de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad en México será conforme a la ley y enfatizó la importancia de la Guardia Nacional como parte de la estrategia. “Lo que está haciendo el presidente López Obrador es que la participación de las Fuerzas Armadas sea conforme a la ley. Han estado participando de manera intermitente, pero sin tener una autorización legal y era poco transparente”, expuso.
Por su parte, la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, señaló que ambos países tienen el reto de reforzar el trabajo para impedir el consumo de drogas sintéticas e inhibir las operaciones de elaboración y trasiego de fentanilo.
“Los ejes de esta cooperación están centrados en combatir las redes criminales que atentan contra la paz de ambas naciones y al mismo tiempo, fortalecer la vida sustentable y segura de nuestras comunidades”, indicó.
Entre los acuerdos, destacó “una campaña masiva de prevención de adicciones en ambos países, porque este tipo de acciones son necesarias para atender esta problemática”, señaló.
Por ello, aseguró que la colaboración internacional basada en el respeto mutuo está rindiendo frutos al cerrar filas en la lucha contra el trasiego de narcóticos.
“Podemos decir que el Entendimiento Bicentenario está rindiendo frutos y, por ello nos comprometemos a seguir colaborando para dar más resultados en favor de la paz”, expresó.
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