San José.— Estados Unidos pactó ayer con el Triángulo Norte de Centroamérica en Guatemala atacar el tráfico ilegal de menores de edad que son prestados y alquilados por sus parientes para ser introducidos en las redes criminales de contrabando de migrantes irregulares guatemaltecos, salvadoreños y hondureños y llevados a México en ruta a suelo estadounidense, anunciaron fuentes oficiales.
El acuerdo fue adoptado en una cita entre el secretario interino de Seguridad Interior de EU, Kevin Mc- Aleenan; el ministro de Gobernación de Guatemala, Enrique Degenhart; el ministro de Justicia y Seguridad Pública de El Salvador, Mauricio Ramírez, y el secretario de Seguridad de Honduras, Julián Pacheco.
“Vamos a invitar a corto plazo al gobierno mexicano a que también participe en estos esfuerzos”, dijo Degenhart, al informar de una decisión que se tomó en medio de la polémica internacional por la muerte de cinco menores migrantes irregulares guatemaltecos y uno salvadoreño en semanas recientes en albergues en EU.
“Este fenómeno de la migración en la región ha llegado a ser una crisis humanitaria que está enriqueciendo a los criminales y matando a los niños”, advirtió McAleenan al finalizar el encuentro y destacar que la migración irregular del área a EU creció 300% en el último año con respecto al periodo previo.
Como parte de la grave crisis migratoria que persiste en la zona, en el lado estadounidense de la frontera con México fueron detectados 4 mil casos de familias centroamericanas que llegaron con menores a los que intentaron hacer pasar fraudulentamente como sus hijos, mientras que a otros infantes y adolescentes se les alquiló o prestó para trasladarlos a EU con falsos padres para tratar de garantizar su estadía en ese país, reveló. “A los niños los están explotando y traficando, muchos menores de esta región y no podemos permitir que eso suceda”, denunció McAleenan, quien llegó el lunes a la capital guatemalteca para una visita de cuatro días concentrada en la crisis migratoria.
Degenhart instó a México a incorporarse a las labores conjuntas. “Es importante que, como región, estemos conscientes [de] que un solo país es incapaz de resolver un tipo de fenómeno migratorio que involucra a seres humanos”, dijo.
Sobre la política migratoria del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, de abrirle la puerta a las oleadas de migrantes centroamericanos, Degenhart adujo que “necesitamos mejorar el trabajo y la coordinación regional”.
Es necesario, agregó, “involucrar al gobierno de México en este esfuerzo del Triángulo Norte con EU”. Definió además una agenda de trabajo “de corto plazo” con “cuatro ejes principales de seguridad regional”, que son “tráfico ilícito de personas, contrabando de drogas y de armas y lavado o legitimación de capitales.