Sharm el Sheij, Egipto.— El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dejó ayer claro a la primera ministra británica, Theresa May, que necesita tener un plan de futuro con respaldo británico de cara a la cumbre comunitaria del 21 y 22 de marzo en Bruselas, explicaron fuentes europeas.
Tusk reaccionó así tras hablar con May durante media hora en una reunión bilateral al margen de la cumbre entre la Unión Europea (UE) y la Liga Árabe, en la que la mandataria británica le trasladó su intención de volver a someter a votación el acuerdo del Brexit en el Paramento antes del 12 de marzo. El grueso de la conversación, explicaron las mismas fuentes, se centró precisamente en “asuntos logísticos y de calendario”, pues se va terminando el tiempo para conseguir un Brexit con acuerdo antes del 29 de marzo.
“No vamos a discutir de nuevo hasta que traiga un texto que tenga el respaldo del parlamento británico”, añadió a EFE otra fuente diplomática.
El primer acuerdo entre Bruselas y Londres que May presentó al Parlamento de Londres no consiguió su respaldo, por lo que los europeos no quieren volver a perder el tiempo en negociaciones que luego puedan hacer aguas en Westmister.
May se comprometió a someter por segunda vez a votación el acuerdo del Brexit antes del 12 de marzo, pero descartó hacerlo esta misma semana, como se había contemplado hasta ahora. La primera ministra descartó las versiones de que pospondría el voto hasta los días previos a la ruptura, fijada para el 29 de marzo.
May se enfrenta todavía este miércoles a un debate en la Cámara de los Comunes en el que los parlamentarios podrán pronunciarse previsiblemente sobre una nueva serie de enmiendas dirigidas a condicionar la hoja de ruta del gobierno.
Aunque todavía no se conoce qué cláusulas se presentarán en la cámara, varios miembros del gabinete de May han sugerido que evalúan respaldar un plan que obligue al Ejecutivo a pedir una extensión del plazo para romper con la UE si a mitad de marzo no se han ratificado los términos de la salida.
Pero desde su llegada a Egipto para la cumbre, la mandataria aseguró que retrasar el Brexit no solucionará el “problema” que afronta Reino Unido. “Siempre va a haber un punto en el que tendremos que decidir si aceptamos el acuerdo que se ha negociado o no”, sostuvo. Añadió que todos los ministros trabajan para intentar que el Reino Unido deje a la Unión Europea con un acuerdo.