El gobierno del presidente de Estados Unidos , Donald Trump , está evaluando la posibilidad de pedir a un juez de San Diego ( California ) más tiempo para reunir a los menores inmigrantes que fueron separados de sus familiares en la frontera con México .
Los abogados del Departamento de Justicia interpusieron anoche un escrito en la corte del distrito sur de California para notificar al magistrado que el Ejecutivo está teniendo dificultades para reunificar a las familias inmigrantes y advertir de que podría necesitar más tiempo.
A finales de junio, el juez de San Diego, Dana Sabraw, determinó que los niños menores de 5 años debían volver con sus padres antes del 10 de julio y estableció que el resto debían reunirse con sus familiares antes del 26 de julio.
Además, el magistrado impuso al Gobierno otra fecha límite para hoy: este viernes los padres inmigrantes deben haber podido comunicarse telefónicamente con sus hijos.
Las autoridades han cumplido con ese requisito fijado por el magistrado, de forma que todos los niños menores de cinco años han podido ya comunicarse con sus padres, según figura en un escrito hecho público hoy y que recoge el testimonio de Robert Guadian, un alto cargo del Servicio de Inmigración y Aduanas ( ICE ).
Asimismo, asegura que los familiares con niños menores de cinco años están detenidos en 23 centros ubicados en 13 de los 50 estados de EU y gestionados por el ICE, agencia encargada de la custodia de los adultos.
Para facilitar la reunificación de las familias, hasta ahora, el ICE ha trasladado a 23 padres con hijos menores de cuatro años a instalaciones que se encuentran cerca de los albergues donde están los niños, según detalla Guadian en su escrito.
Hoy mismo se celebra una audiencia en la corte federal de San Diego y es posible que los abogados del Departamento de Justicia formalicen ahí su petición para pedir un mayor margen para reunir a las familias inmigrantes .
La separación de familias es fruto de la política de "tolerancia cero" que comenzó a implementar oficialmente en abril el Ejecutivo y que lleva a procesar criminalmente a los adultos que llegan irregularmente al país, lo que originó la separación de los niños, puesto que ellos no podían ser privados de libertad.
Ante las fuertes críticas que generó esa separación, Trump se vio obligado a firmar un decreto en el que ordenaba el fin de la división de las familias , pero en el que establece que a partir de ahora los menores deberán ser encerrados con sus padres mientras estos se enfrentan al proceso para ser deportados.
Actualmente, en Estados Unidos los niños no pueden ser privados de libertad durante más de 20 días, pero el Gobierno de Trump ha pedido a la Justicia que amplíe ese límite.
Esta semana, el secretario de Salud y Servicios Sociales (HHS), Alex Azar, explicó a la prensa que bajo custodia de su departamento hay actualmente "algo menos de 3 mil" menores, entre los que se incluyen unos cien de menos de cinco años.
ae