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Washington.— El presidente Donald Trump afirmó ayer que su campaña presidencial fue “ilegalmente espiada” en 2016, al tiempo que acusó al FBI de esa acción a través de Carter Page, un ex asesor.
El magnate insistió en que tuvo una “gran” reunión con el presidente ruso, Vladimir Putin, y enfiló sus ataques hacia las agencias de inteligencia.
Sin presentar evidencias, Trump dijo que los que documentos divulgados el sábado por el FBI relacionados con las intervenciones telefónicas a su ex asesor de campaña Carter Page “confirman con poco margen de duda” que las agencias de inteligencia engañaron a la corte que autorizó esas escuchas.
Sin embargo, legisladores de ambos partidos dijeron que los documentos no muestran acciones ilegales y que, incluso, parecen socavar algunos alegatos previos de republicanos sobre la manera en que se consiguió una orden judicial para espiar a Page.
Las porciones visibles de los documentos fuertemente censurados, difundidos bajo la Ley de Libertad de Información, muestran que al momento de solicitar a la Corte autorización para intervenir las llamadas del ex asesor, el FBI le dijo que Page “ha estado colaborando y conspirando con el gobierno ruso”. La agencia también le dijo a la corte que creía que Page “ha sido blanco de los intentos del gobierno ruso por reclutarlo”.
Al respecto, Trump tuiteó ayer que “están muy censurados, lo cual suele suceder y es absurdo, pero confirman con poco margen de duda que el Departamento de ‘Justicia’ y el FBI engañaron a las Cortes”.
Los documentos recién divulgados parecen socavar algunos de los argumentos hechos en un memo preparado este año por el presidente de la Comisión de Espionaje de la Cámara Baja, el republicano Devin Nunes. Él y otros miembros de su partido han dicho que una investigación antiTrump —preparada por el ex agente de inteligencia británico Christopher Steele y pagada por demócratas— fue usada indebidamente para obtener la orden judicial de espiar a Page.
Si bien los documentos confirman que el FBI se apoyó en parte en la información de Steele para obtener la orden judicial inicial, también indican que el FBI informó a la corte sobre sus probables móviles.
Un pie de página de una hoja de largo en la solicitud de orden judicial explica la evaluación del FBI sobre la historia de Steele y el probable interés de su patrocinador, al tiempo que agrega que, pese a las preocupaciones políticas, el FBI cree que al menos parte de su informe es “creíble”.
El representante Adam Schiff, demócrata de la Comisión de Espionaje de la Cámara Baja, dijo que los documentos detallan “por qué el FBI estaba tan preocupado de que Carter Page pudiera actuar como agente de una potencia extranjera”. “Era una solicitud bien elaborada y tenía renovaciones aprobadas por cuatro diferentes jueces nombrados por tres presidentes republicanos distintos”, dijo Schiff a la cadena ABC.
El senador republicano Marco Rubio declaró que no cree que el FBI haya hecho nada ilegal al obtener autorización judicial para espiar a Page. En 2013, Page se describió como un “asesor informal” para el Kremlin. Sin embargo, ayer dijo a CNN: “Nunca he sido agente de una potencia extranjera”m y señaló que llamarlo asesor “es un intento por manipular la forma en que se percibe lo ocurrido”.