Durante una reunión en la Casa Blanca , el presidente Donald Trump cuestionó el jueves por qué Estados Unidos debería de permitirle la entrada a inmigrantes que provienen de “países de mierda”, mientras rechazaba un plan propuesto por un grupo bipartidista de senadores que habría cambiado las reglas que afectan el ingreso a personas de países africanos y de Haití.
Lo anterior de acuerdo con tres personas al tanto de lo que se habló en la reunión. Por su parte, la Casa Blanca no negó el comentario.
Trump hizo la afirmación en una reunión mientras el senador Dick Durbin , de Illinois, explicaba algunos puntos de un acuerdo que seis senadores habían alcanzado para proteger a cientos de miles de jóvenes inmigrantes de la deportación y reforzar la seguridad en la frontera, indicaron las fuentes.
Durbin explicó que como parte de la medida propuesta, se pondría fin a la lotería de visas que ha beneficiado a personas de países africanos y de otras naciones diversas. A cambio, Durbin dijo que se le permitiría a la gente que huyó de desastres en sus países de origen -incluidos los salvadoreños, guatemaltecos y haitianos- quedarse en Estados Unidos.
Entonces Trump cuestionó por qué Estados Unidos querría admitir a más personas que provienen de Haití. También mencionó a los países africanos y preguntó por qué más personas de “países de mierda” deberían tener permitido entrar a Estados Unidos, explicaron las fuentes.
Cuando el portavoz de la Casa Blanca Raj Shad fue cuestionado sobre los comentarios del presidente, lo defendió y no negó directamente sus afirmaciones.
“Algunos políticos de Washington eligen pelear por países extranjeros, pero el presidente Trump siempre peleará por los estadounidenses”, indicó Shad.
Las fuentes hablaron bajo condición de anonimato debido a que carecían de autorización para declarar sobre los temas que se trataron en la Oficina Oval.
Los comentarios de Trump dejaron impactados a los legisladores presentes en la cita, según el diario, que no aclara si el presidente se refería también a Nicaragua con su exabrupto.
El proyecto de seis senadores bipartidistas eliminaría la llamada "lotería de visados" que cada año asigna 50 mil visas a ciudadanos de países con una baja tasa de emigrantes a Estados Unidos, un mecanismo que beneficia mayoritariamente a países de África.
Según dijo a Efe una fuente del Senado, que pidió el anonimato, la mitad de esos visados beneficiarían a los que hasta ahora estaban protegidos por el TPS y la otra mitad estaría reservada a inmigrantes que demostraran cualidades profesionales que merecieran su entrada en Estados Unidos, el famoso "mérito" que defiende Trump.
El acuerdo también abriría un camino a la ciudadanía para más de un millón de jóvenes indocumentados del país que llegaron al país de niños, conocidos como "soñadores", y concedería más de mil millones de dólares para proyectar y construir una barrera física en la frontera con México.
ae