San José.— El gobierno de Costa Rica reveló ayer que un boletín que la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés), del Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos, envió la semana pasada a la Policía Federal de México fue el que alertó sobre los presuntos nexos de dos egipcios y dos iraquíes con el Estado Islámico (EI).
La oficina pidió detectar e interrogar a los hombres y verificar su situación, precisó el director de la Policía de Migración de Costa Rica, Steven Madden, ayer en rueda de prensa. Los cuatro pretendían viajar por Centroamérica hacia México y EU, según HSI.
“Nos damos cuenta [de la alerta] no de manera oficial, sino por el boletín que está circulando y la información que está circulando en México. Nos sorprende la forma en que el boletín sale, por supuesto, pero no nos sorprende que se consigne información que puede ser de interés para materia de inteligencia”, narró Madden.
El boletín informó a las autoridades que, si los detectaban, pudieran entrevistarlos, agregó, al confirmar que, por esa gestión, fueron sometidos ayer a interrogatorios de la Dirección de Inteligencia y Seguridad, aparato gubernamental costarricense de seguridad del Estado o policía política.
Las personas son los egipcios Mohamed Ibrahim, de 33 años, y Mahmoud Samy Eissa, de 26, y los iraquíes Ahmed Ghanim Mohamed Al Jubury, de 41, y Mustafa Ali Mohamed Yaoob, de 29. Nicaragua los expulsó anteanoche a Costa Rica, como país de procedencia de los cuatro por la frontera bilateral en el sur de suelo nicaragüense.
Madden recordó que los hombres entraron a Panamá el 12 de mayo anterior y el 9 de junio siguiente ingresaron a Costa Rica, donde se les investigó en bases de datos policiales internacionales y en ningún momento surgió información de presuntos lazos con el EI.
Sin hallar anomalías, Costa Rica les concedió 25 días de estadía en suelo costarricense y el 20 pasaron a Nicaragua. “Vamos a hacer todas las consultas” sobre los vínculos de los cuatro, recalcó Madden, al explicar que, al ser expulsados por Nicaragua, entraron en condición migratoria irregular a Costa Rica. Migración de Costa Rica reportó que, tras ser entregados por Nicaragua, viajaron en custodia policial a un centro de aprehensión al norte de esta capital, donde permanecen bajo medidas de seguridad para personas “con un alto perfil de peligrosidad” y ahí estarán hasta definir su deportación y el proceso a seguir. También confirmó que Costa Rica dispone hasta las 02:30 de este jueves para decidir su situación.