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Minneapolis.- El Departamento de Justicia acusó el viernes a la policía de Minneapolis de participar en un patrón de violación de los derechos constitucionales y discriminación contra los negros y los nativos estadounidenses luego de una investigación iniciada por el asesinato de George Floyd.
La amplia investigación sobre los derechos civiles de dos años concluyó que los problemas sistémicos en el Departamento de Policía de Minneapolis “hicieron posible lo que le sucedió a George Floyd”.
La investigación encontró que los oficiales de Minneapolis usaron fuerza excesiva, incluida “fuerza letal injustificada”, y violaron los derechos de las personas que participan en expresiones protegidas constitucionalmente.
La investigación también encontró que tanto la policía de Minneapolis como la ciudad discriminaron a las personas con "discapacidades de salud conductual" cuando se les pidió ayuda a los oficiales.
“Durante años, el MPD usó técnicas y armas peligrosas contra personas que cometieron, como máximo, un delito menor y, a veces, ningún delito en absoluto”, dice el informe. La policía “utilizó la fuerza para castigar a las personas que enojaron a los oficiales o criticaron a la policía”.
Los oficiales “patrullaron los vecindarios de manera diferente según su composición racial y discriminaron según la raza al registrar, esposar o usar la fuerza contra las personas durante las paradas”, dice el informe.
La investigación de "patrón o práctica" se inició en abril de 2021, un día después de que el exoficial Derek Chauvin, que es blanco, fuera condenado por asesinato y homicidio involuntario en el asesinato del 25 de mayo de 2020 de Floyd, que era negro.
Floyd dijo repetidamente que no podía respirar antes de quedarse flácido cuando Chauvin se arrodilló sobre su cuello durante nueve minutos y medio. El asesinato fue grabado por un transeúnte y provocó meses de protestas masivas como parte de un ajuste de cuentas nacional más amplio sobre la injusticia racial.
El informe encontró que la ciudad envió oficiales a las llamadas al 911 relacionadas con la salud del comportamiento, “incluso cuando una respuesta policial no fue apropiada o necesaria, a veces con resultados trágicos. Estas acciones ponen en riesgo a los oficiales de MPD y a la comunidad de Minneapolis”.
Los hallazgos se basaron en revisiones de documentos y archivos de incidentes; observación de videos de cámaras corporales; datos proporcionados por la ciudad y la policía; y paseos y conversaciones con oficiales, residentes y otros, dice el informe.
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Tras asesinato de George Floyd inician reformas en la policía de Minneapolis
Los investigadores federales reconocieron que la ciudad y la policía de Minneapolis ya han comenzado reformas.
El informe señaló que la policía ahora tiene prohibido usar restricciones en el cuello como la que usó Chauvin para matar a Floyd. A los oficiales ya no se les permite usar algunas armas de control de multitudes sin el permiso del jefe. Y las órdenes de arresto sin aviso fueron prohibidas después de la muerte de Amir Locke en 2022.
La ciudad también ha lanzado un programa de respuesta de salud conductual "prometedor" en el que profesionales de salud mental capacitados responden a algunas llamadas en lugar de la policía.
El Departamento de Justicia no está solo en sus hallazgos de problemas.
Una investigación similar realizada por el Departamento de Derechos Humanos de Minnesota condujo a un "acuerdo de conciliación ejecutable por la corte" para abordar la larga lista de problemas identificados en el informe, con aportes de residentes, oficiales, personal de la ciudad y otros. Frey y la comisionada estatal de Derechos Humanos, Rebecca Lucero, firmaron el acuerdo en marzo.
La investigación estatal, que concluyó en abril de 2022, encontró “disparidades raciales significativas con respecto al uso de la fuerza por parte de los agentes, las detenciones de tráfico, los registros, las citaciones y los arrestos”. Y criticó “una cultura organizacional donde algunos oficiales y supervisores usan un lenguaje racista, misógino e irrespetuoso con impunidad”.
Lucero dijo que el acuerdo legalmente vinculante requiere que la ciudad y el departamento de policía realicen "cambios transformadores" para arreglar la cultura organizacional de la fuerza, y señaló que podría servir como modelo de cómo las ciudades, los departamentos de policía y los miembros de la comunidad en otros lugares trabajan para detener la carrera. vigilancia policial basada.
La investigación federal podría haber dado lugar a un acuerdo exigible judicialmente por separado pero similar, conocido como decreto de consentimiento, que se superpondría al acuerdo con el estado.
Varios departamentos de policía en otras ciudades operan bajo decretos de consentimientopor presuntas violaciones de los derechos civiles. Un decreto de consentimiento requiere que las agencias cumplan objetivos específicos antes de que se elimine la supervisión federal, un proceso que a menudo lleva muchos años y cuesta millones de dólares.
Floyd, de 46 años, fue arrestado bajo sospecha de pasar un billete falso de 20 dólares por un paquete de cigarrillos en un mercado de la esquina. Luchó con la policía cuando trataron de ponerlo en una patrulla y, aunque ya estaba esposado, lo obligaron a tirarse al suelo.
Cuando Chauvin presionó su rodilla contra el cuello de Floyd, el oficial J. Alexander Kueng sostuvo la espalda de Floyd, el oficial Thomas Lane sostuvo los pies de Floyd y el oficial Tou Thao mantuvo alejados a los transeúntes.
Chauvin fue sentenciado a 22 años y medio por asesinato. También se declaró culpable de un cargo federal de violar los derechos civiles de Floyd y fue sentenciado a 21 años en ese caso. Está cumpliendo las sentencias al mismo tiempo en Tucson, Arizona.
Kueng, Lane y Thao fueron condenados por cargos federales en febrero de 2022. Los tres fueron condenados por privar a Floyd de su derecho a la atención médica, y Thao y Kueng también fueron condenados por no intervenir para detener a Chauvin durante el asesinato. Desde entonces, Lane y Kueng se han declarado culpables de un cargo estatal de complicidad en homicidio involuntario en segundo grado. A cambio, se retiraron los cargos de complicidad en el asesinato.
Lane, que es blanco, cumple su sentencia federal de dos años y medio en una instalación en Colorado. Al mismo tiempo, está cumpliendo una sentencia estatal de tres años. Kueng, quien es negro, cumple una sentencia federal de tres años en Ohio, mientras también cumple una sentencia estatal de tres años y medio.
Thao, quien es estadounidense Hmong, recibió una sentencia federal de 3 años y medio. En mayo, el juez del caso estatal lo delcaró culpable de ayudar e incitar al homicidio. Thao había dicho que "sería mentir" si se hubiera declarado culpable y accedió a dejar que el juez decidiera el caso. El juez fijó la sentencia para el 7 de agosto.
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