Más Información

Ealy Ortiz: La decisión del gobierno de combatir la corrupción de raíz debe ser apoyada desde todos los ámbitos posibles

Muere médica cubana del IMSS-Bienestar mientras laboraba en hospital de Veracruz; embajada de Cuba lamenta fallecimiento

IPN entregará doctorado Honoris Causa a Manuela Obrador, prima de AMLO; Cárdenas y Sergio Salomón también serán galardonados

Sheinbaum visita Neza tras tromba que dejó varias afectaciones; “no se va a quedar ninguna familia desamparada”, afirma

Investigación de huachicol fiscal no ha terminado: Rosa Icela Rodríguez; “bastantes personas serán procesadas”, asegura

Dictan prisión oficiosa a exfuncionario aduanero implicado en operativo “Rápido y Furioso”; es acusado de tráfico de armas
Washington. El secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, anunció, en una inusual reunión de generales y altos oficiales, que impondrá directivas que buscarán restaurar el "más alto estándar masculino" en un Ejército con nuevos requerimientos físicos para evitar soldados "gordos" y "barbudos".
"Hoy, bajo mi dirección, cada servicio se asegurará de que todos los requisitos para cada ajusten exclusivamente al más alto estándar masculino. (...) La era del liderazgo políticamente correcto y excesivamente sensible termina ahora mismo", dijo Hegseth ante cientos de comandantes llegados desde todas partes del mundo.
La inédita junta, en la que también hablará el presidente Donald Trump, se celebra en una base del Cuerpo de Infantería de Marina en Quantico (Virginia, a unos 60 kilómetros de Washington), en medio de una alarma generalizada ante la posibilidad de nuevas purgas entre los altos mandos.
Lee también Trump hablará en reunión urgente con líderes militares; convocan a generales y almirantes en Quantico
El jefe del Pentágono criticó la existencia de "soldados gordos" en las formaciones y advirtió que es "completamente inaceptable" y "da mala imagen" ver a "generales y almirantes gordos", por lo que ordenó que todo miembro, sin importar el rango, debe realizar exámenes físicos y mediciones "dos veces al año, cada año de servicio".
Entre las 10 directivas anunciadas por Hegseth también se incluyen "estándares de aseo personal" para acabar con las "barbas, el cabello largo y las expresiones superficiales e individuales", una revisión en "cada forma de educación militar profesional" y la eliminación de políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI).
"No quiero que mi hijo sirva junto a tropas que no están en forma ni en unidades de combate, con mujeres que no pueden cumplir con los mismos estándares físicos de combate que los hombres", insistió el líder de la cartera, rebautizada como Departamento de Guerra.
También pareció insinuar nuevos cambios en el liderazgo, al advertir que "durante demasiado tiempo se ha ascendido a demasiados líderes uniformados por razones equivocadas: por su raza, por cuotas de género y por supuestos logros históricos".
"No más cambio climático. No más división, distracción ni delirios de género, no más escombros. Como he dicho antes y lo diré de nuevo, hemos terminado con esa mierda", señaló.
Hegseth, veterano del Ejército de Tierra, ha manifestado en repetidas ocasiones su desprecio por altos cargos que, según él, han introducido ideología liberal en la cultura militar estadounidense.
El actual secretario de Guerra ha destituido a varios generales desde que asumió el cargo a comienzos de este año, y en mayo anunció su intención de reducir en al menos un 20% el número de generales y almirantes de cuatro estrellas.
Trump dice que "resucitará el espíritu guerrero"
Más tarde, Trump dijo que "resucitará el espíritu guerrero" de las fuerzas armadas de Estados Unidos que "ganó y construyó esta nación", en un discurso ante la cúpula militar en las afueras de Washington, y se lanzó contra lo políticamente correcto.
"Juntos, en los próximos años, vamos a transformar a nuestras fuerzas armadas en algo más fuerte, más recio, más rápido", declaró Trump a los generales y almirantes estadounidenses.
El presidente también advirtió que “Estados Unidos está bajo invasión desde dentro”.
También se quejó de los "insurrectos" financiados por la "izquierda radical".
“Muchos de nuestros líderes utilizaron nuestras fuerzas armadas para mantener la paz”, dijo.
Añadió que las "ciudades peligrosas" podrían ser "campos de entrenamiento" para las tropas.
“Después de gastar billones de dólares defendiendo las fronteras de países extranjeros, con su ayuda estamos defendiendo las fronteras de nuestro país”, dijo Trump.
Trump está acostumbrado a multitudes bulliciosas de simpatizantes que se ríen de sus chistes y aplauden sus alardes durante sus discursos.
Siguiendo la tradición no partidista de las fuerzas armadas, los líderes militares permanecieron en su mayoría impasibles durante los comentarios politizados de Trump, un contraste con cuando los soldados rasos aplaudieron durante el discurso de Trump en Fort Bragg este verano.
Trump aseguró que "el propósito de las fuerzas armadas estadounidenses no es proteger los sentimientos de nadie. Es proteger nuestra república".
"No seremos políticamente correctos a la hora de defender la libertad estadounidense", dijo Trump. "Y seremos una máquina de lucha y victoria".
El presidente habló durante una hora y 13 minutos sobre una variedad de temas.
ss/mcc