La noche del 25 de noviembre, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel asistió a la Universidad de La Habana para honrar al revolucionario Fidel Castro tras ocho años de su fallecimiento. Este evento se yuxtapone a la crisis eléctrica que vive la isla desde mediados de octubre, cuando el sistema de energía colapsó por falta de combustible y una descompostura en la principal termoeléctrica del país. Además, Cuba actualmente se encuentra en recuperación tras el paso de los huracanes Oscar y Rafael, donde hubo más de 46 mil viviendas afectadas.
En este aniversario luctuoso, Díaz-Canel aseguró que los jóvenes asistentes recordaron al exmandatario no con tristeza sino con optimismo, y que se mantiene "con el compromiso invariable de mantener por siempre su legado". De igual manera, compartió que fue una velada atestada de emociones e inspiradora "para seguir enfrentando, juntos, adversidades y desafíos".
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Junto al presidente, estuvieron presentes en el acto también el Comandante de la Revolución Ramiro Valdés; el Comandante del Ejército Rebelde, José Ramón Machado Ventura; Esteban Lazo, presidente de la Asamblea Nacional de Cuba y Roberto Morales Ojeda, Miembro del Buró Político y Secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
En el festejo, la Primera Secretaria del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas de Cuba, Meyvis Estevez Echevarría, asistó como representación de la juventud cubana. En su discurso, la líder juvenil invitó a los presentes a "seguir construyendo la Cuba solidaria que defiende la unidad" y aclamó que Fidel Castro dejó un país libre y digno.
Durante este homenaje, hubo música, danza, ballet y lectura en voz alta de poesía. Mediante X, la cuenta oficial de la Presidencia de la República de Cuba expresó que los artistas dedicaron una noche memorable al "siempre joven Fidel" que "tanto hizo por la cultura y la dignidad de la Patria".
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De manera simultánea, exhibieron audiovisuales de Fidel Castro con la finalidad de "mostrar su especial relación con el pueblo cubano". En el festejo buscaron resaltar también a Raúl Castro, hermano de Fidel, que igualmente fungió como presidente de la república de 2008 hasta 2018.
Fidel Castro, tras derrocar la dictadura de Fulgencio Batista mediante una guerra de guerrillas durante la Revolución cubana, estuvo en el poder ejecutivo de su país durante casi 50 años, como primer ministro y presidente. El revolucionario fallleció a los 90 años el 25 de noviembre de 2016 en La Habana. Para Miguel Díaz-Canel Bermúdez "Fidel vive en nuestra juventud y en las luchas de todos los días".
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En octubre, el sistema eléctrico de Cuba falló a nivel nacional por falta de combustible y descomposturas termoelétricas. Desde entonces, las protestas ciudadanas acrecentaron por el descontento de la falta de luz. Para el mandatario Díaz-Canel, estas personas actuaban "bajo orientaciones que les dan operadores de la contrarrevolución cubana desde el exterior". Los manifestantes fueron detenidos y procesados "bajo las leyes revolucionarias".
Múltiples zonas el oeste del país, incluida La Habana, se vieron afectadas por esta falta de energía. A pesar de que el Servicio Eléctrico Nacional de Cuba logró reanudar el servicio días después, los apagones totales se prolongaron hasta por tres semanas. En el resto de la isla los apagones son intermitentes por la incapacidad del SEN para producir suficiente electricidad para satisfacer la demanda ciudadana, un problema crónico que cada vez es mayor.
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Al mismo tiempo, Cuba se ha visto afectado por catástrofes naturales en las últimas semanas; tras el paso de los huracanes Rafael y Oscar, que dejaron más de 46 mil 400 viviendas dañadas en las provincias del occidente y el oriente de Cuba. De acuerdo con René Mesa, ministro cubano de la Construcción, más del 80% de las afectaciones se localizan en daños parciales y totales en los techos.
Oscar impactó la costa nororiental de Cuba el pasado 21 de octubre como un huracán categoría 1 y dejó un saldo de ocho muertos y severos daños en las viviendas de la provincia de Guantánamo.
Rafael, por otro lado, impactó el occidente a principios de noviembre con categoría 3 y, además de las afectaciones, provocó de nueva cuenta un apagón nacional. El segundo en menos de dos semanas y el tercero en apenas dos años. Además, a ello se sumaron dos sismos de magnitud 6 y 6.7 grados registrados en el suroriente de Cuba que dejaron al menos 10 heridos.
mgm
