Madrid.— El cambio climático y el alza del nivel de los océanos podrían hacer desaparecer la mitad de las playas en el mundo de aquí a 2100, de acuerdo con un estudio publicado ayer por la revista Nature Climate Change.
Aunque la humanidad logre reducir de manera eficaz las emisiones de gases de efecto invernadero, que son las responsables del calentamiento global, más de un tercio de los litorales arenosos se encuentran amenazados, según el informe.
La desaparición de playas tendría un gran impacto sobre las actividades turísticas, pero no solamente a este nivel.
“Además del turismo, las playas constituyen a menudo el primer mecanismo de protección contra las tormentas e inundaciones y, sin éstas, los impactos de los fenómenos climáticos extremos serían probablemente mucho más fuertes”, advirtió Michalis Vousdoukas, investigador en el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea.
Las playas de arena ocupan más de un tercio de los litorales marítimos del mundo y, a menudo, se encuentran en regiones densamente pobladas.
Están amenazadas por la erosión a causa de las construcciones, el alza del nivel de los océanos y las tormentas, amenazando la infraestructura y la vida.
Australia podría ser el país más afectado, con sus casi 15 mil kilómetros de playas arenosas borradas del mapa dentro de 80 años, por delante de Canadá, Chile y Estados Unidos. México, China, Rusia, Argentina, India y Brasil también se encuentran entre los países en primera línea en cuanto a fragilidad.
Efectos de la contaminación del aire
Otro informe, publicado por la revista Cardiovascular Research, reveló que la polución del aire acorta la esperanza de vida una medida de casi tres años, lo que supone más que el tabaco, el sida, las guerras o enfermedades como la malaria.
Los resultados del informe, firmado por la Universidad de Mainz y el Instituto Max Planck, ambos en Alemania, sugieren que “el mundo se enfrenta a una ‘pandemia’ de contaminación del aire”, indica un comunicado de la Sociedad Europea de Cardiología. El estudio apunta que la mala calidad el aire afecta en especial a las personas de más edad.