San José.— Por la imparable violencia criminal, las añejas proclamas gubernamentales“vamos a llegar hasta las últimas consecuencias” y “vamos a tomar cartas en el asunto”— resonaron desde la noche del viernes anterior en, pero la realidad mostró un continuo agravamiento de la inseguridad que superó las consignas políticas oficialistas.

En Ecuador “la situación es incierta”, advirtió el general en retiro Luis Altamirano, excomandante general de las Fuerzas Armadas de ese país y profesor universitario.

En Chile “es inevitable” el deterioro de la seguridad, adujo el arquitecto y urbanista Matías Garretón, jefe del Observatorio de Conflictos del (no estatal) Centro de Estudios de Conflictos y Cohesión Social (COES), de Chile. Consultados por aparte por EL UNIVERSAL, coincidieron en que, sin ser nueva, la situación en ambas naciones muestra un imparable desgaste.

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Una oleada de muerte sumó a numerosas víctimas —en Ecuador a una exreina de belleza y a dos menores de edad, entre otros, y en Chile a tres policías de Carabineros— y evidenció el impacto de la incesante penetración criminal en ambos países de mafias de México, Colombia, Venezuela y Europa.

Ecuador registró sangrientas jornadas el fin de semana anterior en distintas partes, como los homicidios de menores de edad. El asesinato a balazos, el domingo en un restaurante, de la modelo y exreina de belleza ecuatoriana Landy Párraga, presuntamente ligada a una trama de narcotráfico, sacudió al país y volvió a desnudar la incursión criminal. Ecuador emergió en el siglo XXI como pieza clave del contrabando de cocaína a Centroamérica, México, Estados Unidos, Europa, Asia, África y Oceanía. El fenómeno evidenció la irrupción de los principales cárteles de México, como los De Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG), y de mafias de Colombia, Albania y los Balcanes en alianza con pandillas ecuatorianas.

El presidente de Ecuador, el derechista Daniel Noboa, decretó el 9 de enero de este año el estado de “conflicto armado interno” para combatir a 22 redes “terroristas”.

Noboa recibió el domingo antepasado en las urnas un apoyo masivo para su lucha anticrimen y luego exhibió una caída en el dato de homicidios. De mil 372 en 2020 subió a 8 mil 9 en 2023 y de enero a abril de 2024 llegó a mil 707 frente a 2 mil 85 en ese periodo de 2023.

“Las organizaciones delictivas de Ecuador son operadoras de mafias de Colombia y de cárteles de México. Hay un engrosamiento de estructuras delictivas vinculadas al narcotráfico y a la extorsión y el secuestro. Hay un crecimiento inusitado de las pandillas y más de 60 mil personas que buscan de qué vivir. Es una masa, en su mayoría ecuatorianos, vinculada a actividades delictivas y que ha hecho de esto su modo de vida”, narró Altamirano.

“Con pensar sólo en el eje de fuerza [policial y militar], el resultado final puede ser diversificar [a la delincuencia]. No hay que olvidar que hay una lógica económica. Ecuador sigue siendo un centro de distribución internacional [de cocaína], porque los costos [de contrabando] por Ecuador son menores que los de Colombia”, planteó. Noboa insiste en que su política de seguridad y anticorrupción “está dando resultados”.

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Conflicto chileno

“No descarto ninguna de las herramientas legales a nuestra disposición”, alertó el presidente de Chile, el izquierdista Gabriel Boric, tras los asesinatos, en la madrugada del sábado, de los policías en el conflictivo sector del centro-sur. Boric impuso el toque de queda en el área. Por la inseguridad, Chile aumentó los homicidios de 4.5 por cada 100 mil habitantes en 2018 a 6.7 en 2023. El gobierno resaltó que fueron mil 248 en 2023 frente a mil 330 en 2022.

Aunque una sospecha por el triple crimen cayó sobre la mafia venezolana de El Tren de Aragua, que nació hace 15 años en una cárcel de Venezuela, se propagó por América y se infiltró a Chile desde 2017 y 2018, los indicios apuntaron a traficantes chilenos de madera, pero se siguió al pendiente del resultado de las indagaciones oficiales y ya hay tres detenidos. “Más allá de lo terrible, brutal, que quemen a tres Carabineros, es inevitable que se vaya deteriorando la inseguridad mientras dejemos que exista el crimen organizado en la zona. El crimen organizado siempre termina en violencia”, denunció Garretón.

“Lo único nuevo es la brutalidad [del triple asesinato]. El problema ya es de varios años. Un oficial de inteligencia de Carabineros se coludió en 2022 con empresarios de robo de madera. Lo investigaron y dieron de baja”, recordó. Tras destacar que “el robo de madera no es cualquier robo”, porque se requiere de un gigantesco apoyo logístico, aseguró que “no estamos hablando de bandas pequeñas y poco organizadas: hablamos de empresarios inescrupulosos coludidos” con autoridades y “otras fuerzas de la zona”.

“Llevan muchos años robando madera. Simulan actos terroristas para desviar la atención hacia los mapuches”, aseveró al referirse al más importante pueblo indígena de Chile y cuyos territorios, en la región de La Araucania, colindan con la de Biobío, donde fueron ultimados los policías. Al aducir que el lío seguirá “mientras haya impunidad financiera” porque “están lavando mucho dinero”, alegó que “el espectáculo” de dictar Estado de sitio “no es la solución” y que “la piedra de toque en Chile para combatir el crimen organizado es levantar el secreto bancario”.

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