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Donald Trump parece tener suerte, pese a todo. En este año tuvo su momento luego de sobrevivir a un atentado en su contra en un mitin en Butler, Pennsylvania, antes de la Convención Republicana, en Milwaukee, Wisconsin, donde fue oficializado como candidato. Parecía que la buena fortuna le acompañaba luego del pésimo debate que tuvo el actual mandatario demócrata Joe Biden frente a él; sin embargo, Biden desistió de buscar la reelección y dejó el paso a la actual vicepresidenta Kamala Harris.
El 2024 no empezó bien para Trump, magnate neoyorquino, de 78 años, por los juicios en su contra. En este año se convirtió en el primer expresidente convicto, luego de ser declarado culpable de 34 delitos por falsificar registros comerciales para ocultar una relación sexual con Stormy Daniels, una actriz porno, y se esperaba que el 18 de septiembre se conociera su sentencia, pero se retrasó hasta el 26 de noviembre, para después de las elecciones. Por la falsificación de registros comerciales puede obtener cuatro años de cárcel, pero es posible que quede en libertad condicional o reciba una multa.
Y aunque cumpliera tiempo en prisión, ha decidido volver a buscar la presidencia, junto al que ha decidido que será su compañero de fórmula: JD Vance. No obstante, hay otros juicios contra el exmandatario que pueden resumir su vida.
Su relación con las mujeres
Para iniciar el año, durante enero, un jurado lo declaró responsable de agredir sexualmente a la periodista y escritora E. Jean Carroll en 1996, y un segundo jurado determinó que la calumnió cuando siguió negándolo.
Los montos fijados en los juicios fueron de 5 y 88 millones de dólares respectivamente. El exmandatario apeló los veredictos. La escritora denunció al magnate neoyorquino, por la vía civil, y lo acusó de abuso sexual por un ataque en la década de 1990 al interior de una tienda departamental en Nueva York. En el juicio y en el caso penal se recordó una cinta que muestra el desdén del exmandatario hacia las mujeres: durante declaraciones para la cinta Access Hollywood, comentó de modo vulgar sobre su relación con ellas, al afirmar que las agarraba por los genitales.
En el caso de Carroll, un primer jurado declaró culpable al exmandatario, pero éste la acusó de mentir cuando la escritora hizo públicas las denuncias, por lo que lo demandó de nuevo por difamación y Trump perdió, de nuevo. El expresidente volvió a apelar. Y apenas el viernes volvió a negar todo. El caso demuestra su mala relación con las mujeres; no obstante, se ha casado en tres ocasiones y llegó a ser el dueño de los concursos de belleza Miss USA y Miss Universo. Sus inversiones también involucraron la construcción de viviendas, hoteles, centros de convenciones y casinos, entre otros; esa faceta también fue llevada a un proceso judicial.
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El lado empresarial
En febrero, un juez falló en contra del exmandatario en un caso de fraude por el que le ordenó pagar, a él y a sus hijos mayores, casi 355 millones de dólares; el magnate también está apelando ese veredicto.
Según el fallo, el fraude se realizó para obtener préstamos favorables de bancos y aseguradoras.
Además de ordenarles pagar 354.9 millones de dólares, el juez Arthur Engoron le prohibió a Trump hacer negocios en Nueva York durante tres años. No obstante, se salvó de la pena de muerte corporativa, es decir, la cancelación de sus licencias comerciales.
Durante su carrera, Trump ha presumido de ser un empresario exitoso. Hijo de un acaudalado promotor inmobiliario de Nueva York, Trump inició su carrera en la empresa familiar Elizabeth Trump & Sons, fundada por su abuela y su padre, Fred Trump. En 1971 tomó el control de la compañía y la rebautizó Trump Organization.
El diario The New York Times publicó entonces que su imperio en suelo estadounidense y en el extranjero se asentaba sobre “un laberinto de deudas y lazos opacos”.
Aunque lo anterior no evitó que construyera una imagen de persona exitosa que le sirvió para hacer negocios, ser un showman, adquirir poder, salir de la bancarrota y convertirse una vez en presidente y volver a competir al tener el control del Partido Republicano. También se llegó a referir a sí mismo como “el presidente más provida” de Estados Unidos”, nominó a tres jueces conservadores a la Corte Suprema, allanando el camino para revocar el fallo Roe vs. Wade, que legalizó el aborto en todo Estados Unidos durante casi 50 años.
Además, el exmandatario aún tiene apoyo pese a ser sometido dos veces a juicio político e incitar la insurrección en el Capitolio el 6 de enero de 2021, al no aceptar su derrota frente al demócrata Joe Biden.
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Políticas antiinmigrantes
Otro factor clave son sus políticas contra los migrantes en su gestión, por las cuales llegó a separar a familias de indocumentados y su promesa de construir un famoso muro y que México pagara por él.
Incluso antes de ser presidente acusó a los migrantes mexicanos de ser problemáticos, traficantes, criminales e incluso “violadores”. Durante su periodo en la Casa Blanca también implantó la política Quédate en México, que retenía a migrantes en la frontera con EU mientras duraba su proceso de solicitud de asilo.
Su relación en específico con México siempre fue tirante al grado de amagar con poner aranceles y consiguió que las autoridades mexicanas pusieran miles de soldados de la Guardia Nacional en la frontera, como ha presumido varias veces.
Durante su mandato también buscó una negociación con Kim Jong-un, líder norcoreano, se salió del acuerdo nuclear iraní, mostró afinidad con el mandatario ruso, Vladimir Putin y mantuvo una relación complicada con la OTAN y la Unión Europea, sobre todo por sus políticas de “EU primero”.
Interferencia electoral
También por la actuación al final de su mandato el republicano fue acusado de interferencia en las elecciones de 2020. Sin embargo, y pese a todo, de nuevo, el 1 de julio, la Corte Suprema dictaminó que el exmandatario puede reclamar inmunidad frente a un proceso penal por las acciones tomadas en el cargo. Tras ese fallo, el fiscal especial Jack Smith presentó una nueva acusación por el caso del asalto al Capitolio, del que se declaró no culpable. Otro caso de interferencia es el que se realiza en el condado de Fulton, Georgia. Durante el final de su administración también tuvo graves problemas, que derivaron en otros casos en su contra. En junio de 2023 fue acusado de tomar documentos clasificados y llevarlos a su mansión en Mar-a-Lago. El punto central de la acusación es que retuvo los archivos de forma deliberada.
Pese a todo, Trump es candidato republicano y las encuestas muestran que tiene probabilidades de volver a la Casa Blanca. ¿Lo seguirá acompañando la suerte?