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Washington.— El gobierno de Estados Unidos en tres administraciones de la Casa Blanca desinformó al público sobre los fracasos en la guerra de Afganistán, con frecuencia mencionando éxitos inexistentes, según miles de páginas de documentos obtenidos por el periódico The Washington Post.
Los textos revelan profundas frustraciones en torno a la conducta de Washington en la guerra en el país asiático, incluso con respecto a la siempre cambiante estrategia de Estados Unidos, los apuros para desarrollar una fuerza de combate afgana realmente efectiva y los persistentes fracasos para derrotar al Talibán y combatir la corrupción en todo el gobierno.
“Carecíamos de una comprensión fundamental de Afganistán; no sabíamos lo que hacíamos”, dijo Douglas Lute, un general de tres estrellas del ejército que fue el zar afgano en la Casa Blanca durante los gobiernos de George W. Bush y Barack Obama, en declaraciones a entrevistadores en 2015. Las entrevistas fueron realizadas durante los últimos años dentro del proyecto Lecciones aprendidas del inspector general especial para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR, por sus siglas en inglés). Hasta el momento, el SIGAR ha publicado siete informes a partir de las más de 400 entrevistas, y se están desarrollando varios más. El Post pidió y recibió datos de las entrevistas sin editar gracias a la Ley de Libertad de Información y a demandas.
En los documentos se cita a funcionarios familiarizados con la guerra de 18 años que describen una campaña del gobierno de EU para distorsionar la cruda realidad del conflicto. “Cada dato fue alterado para presentar el mejor panorama posible”, dijo Bob Crowley, un coronel del ejército.