Londres.— Realizar el Brexit en enero y negociar después vastos acuerdos de libre comercio es la prioridad número uno del nuevo gobierno del británico Boris Johnson, subrayó ayer la reina Isabel en el protocolario discurso con que inauguró la flamante Legislatura.

Sentada en el trono de oro de la Cámara de los Lores junto a su heredero, Carlos, la monarca de 93 años leyó el programa de política general del Ejecutivo, que abarca desde un importante aumento en la financiación de la sanidad pública hasta la mejora de la educación; sin embargo la primera y principal tarea de Johnson, que la semana pasada obtuvo la más amplia mayoría conservadora desde 1987, está muy clara.

“La prioridad de mi gobierno es lograr que Reino Unido abandone la Unión Europea el 31 de enero”, leyó la reina frente a los Lores y los diputados reunidos para la ocasión. “Acto seguido, mis ministros buscarán una futura relación con la Unión Europea basada en un acuerdo de libre comercio” y “también iniciarán negociaciones comerciales con otras grandes economías mundiales”, agregó.

Aplazado tres veces por el bloqueo del anterior Parlamento, el Brexit, decidido por referéndum en 2016, está previsto a finales de enero. Ahora, gracias a sus 365 diputados en un Parlamento de 650 escaños, Johnson tiene garantizada su aprobación.

El viernes, el primer ministro presentará al Parlamento el proyecto de ley que debe traducir a la legislación británica los términos del acuerdo de divorcio con Bruselas. Se llevará a cabo una primera votación, pero su adopción definitiva quedará para enero.

“Mañana es el día en que finalmente quitamos el envoltorio de plástico (...) y presentamos nuestro acuerdo listo para calentar”, afirmó Johnson. Tras la aprobación del Tratado de Retirada comenzará sin embargo una segunda, y más compleja, fase de negociación: la de la futura relación entre Londres y Bruselas. Johnson incluyó en la ley la prohibición de ir más allá del plazo inicial del 31 de diciembre de 2020. Londres quiere negociar tratados comerciales con EU y Australia.

La promesa de una rápida salida de la UE valió a Johnson su aplastante victoria electoral, pero también agravó las fisuras en la unidad del país. Desde Edimburgo, la jefa del gobierno escocés, Nicola Sturgeon, llamó el jueves “al gobierno británico a negociar y acordar” la convocatoria de un nuevo referéndum sobre la independencia tras el de 2014 en que ganó el no.

Dijo que considerará “todas las opciones razonables para garantizar el derecho de Escocia a la autodeterminación”. Tras el Brexit, el otro proyecto de ley del Ejecutivo versará sobre la financiación del servicio público de salud. Johnson promete aumentar en hasta 33 mil 900 millones de libras (44 mil 350 millones de dólares, 39 mil 900 millones de euros) en 2023-2024 el monto destinado a sanidad. Entre las otras medidas anunciadas, endurecimientos en el sistema migratorio y el judicial, para “garantizar que los criminales más violentos, incluidos los terroristas, permanezcan más tiempo en prisión”, y el objetivo de alcanzar la neutralidad de carbono en 2050.

Google News

Más Información

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses