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El número de muertos por los devastadores aludes en California subieron a 15 este miércoles, mientras los rescatistas buscaban sobrevivientes y cuerpos entre los restos de las casas destruidas.
Una intensa tormenta arrastró el martes lodo y escombros que cayeron por las colinas hacia la localidad de Montecito, en el condado de Santa Barbara, devastando territorios ya afectados por el incendio Thomas el mes pasado.
Las inundaciones afectaron la cara sur de las laderas sobre el poblado de 9 mil habitantes (al noroeste de Los Ángeles), lanzando enormes rocas contra casas, según los servicios de emergencia .
"La oficina del comisario puede confirmar 15 muertes, pero no es posible dar detalles adicionales por el momento", dijo un portavoz del condado en Twitter.
Al menos otras 25 personas resultaron heridas, indicaron las autoridades, mientras los primeros rescatistas en la zona lograron sacar por aire a unos 50 residentes y a decenas más por tierra .
"Estamos trabajando para identificar a las personas que todavía pueden estar atrapadas y aisladas en áreas a las que no hemos logrado un acceso completo", dijo el comisario de Santa Barbara, Bill Brown, al canal CBS.
"Trabajamos durante la noche y estoy contento de decir que logramos sacar algunas personas atrapadas en casas", agregó.
El responsable indicó que no hay modo de decir cuántas personas siguen atrapadas y que algunos residentes ignoraron las órdenes de evacuación.
"Pienso que la mayoría de las personas están en shock por la extensión del daño y cuán grande fue el impacto en el área. Aunque sabíamos que esto ocurriría, no puedes evitar sorprenderte por la intensidad de la tormenta y el resultado del deslizamiento de lodo y agua que caía como cascada por las colinas", dijo.
El departamento de Bomberos de Santa Barbara dijo el martes que usaba perros para rastrear a las víctimas, en zonas de Montecito donde muchas casas colapsaron .
Los bomberos publicaron en Twitter fotos de ríos de lodo corriendo por los barrios, casas destruidas, carros aplastados que quedaron dados la vuelta y rutas cubiertas de árboles caídos.
Más de 50 kilómetros de la autopista 101, que conecta California de norte a sur, quedaron inhabilitados debido a que el lodo bloqueó varias rutas y destruyó casas desde sus cimientos.
En el condado de Ventura se registró un récord de 13 centímetros cúbicos de lluvia, según el servicio meteorológico de Los Ángeles.
Gran parte de la zona afectada ya había sido recientemente azotada por el voraz incendio Thomas, el segundo más grande registrado en la historia de California , por lo que no existía la vegetación necesaria para absorber el exceso de agua.
Otra orden de evacuación fue emitida en el suburbio Burbank, donde un alud sacó vehículos de las vías y los llevó aguas abajo.
Los deslaves también causaron importantes fugas de gas. Y un esfuerzo por reparar la fuga dejó a varios hogares sin gas, electricidad o agua.
"Había muchos hogares, entre 40 y 45, afectados (por los cortes)", indicó el jefe de bomberos de Burbank, John Owings, al canal local KCAL9.
"Realizamos dos rescates aproximadamente a las siete de la mañana", dijo también.
Las inundaciones forzaron el cierre del área de aduana de la terminal 2 del aeropuerto internacional de Los Ángeles.
Las lluvias cesaron para la noche del martes, pero las órdenes de evacuación seguían activas en la región debido a la amenaza de nuevos deslizamientos.
"Cualquier lluvia adicional va a deslizar más lodo hacia abajo", dijo Owings.
La tormenta se desató después de 10 meses de sequía, que a su vez siguieron a un periodo de torrenciales lluvias en enero y febrero de 2017.
lsm