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Washington.— Dieciséis infantes de Marina de Estados Unidos fueron arrestados ayer por cargos de tráfico de drogas y personas en una base militar en California, en el norte de la frontera con México, informó el cuerpo en un comunicado.
“Los 16 elementos fueron arrestados por su presunta participación en diversas actividades ilegales que van desde el contrabando de personas hasta delitos relacionados con las drogas”, indicó el texto. La detención masiva fue llevada a cabo por funcionarios de la Primera División de Infantería de Marina junto al Servicio Naval de Investigación Penal (NCIS, por sus siglas en inglés) durante una formación de batallón en Camp Pendleton, a 90 km de la frontera con México.
Según la declaración, otros “ocho infantes de Marina quedaron apartados para ser interrogados sobre su participación en presuntos delitos relacionados con las drogas que no están ligados con los arrestos”.
El sitio web de noticias militares Task & Purpose informó que las detenciones se debieron a la información tomada de los teléfonos de Byron Darnell Law II y David Javier Salazar-Quintero, dos infantes de Marina arrestados por tráfico de inmigrantes mexicanos indocumentados a la Unión Americana en julio.
El comunicado del Cuerpo de Infantería de Marina dijo que los soldados arrestados no formaban parte del despliegue ordenado en la frontera entre México y EU como parte del plan del presidente Donald Trump para detener el flujo de inmigrantes.
El mandatario anunció una medida, el pasado 15 de julio, por la que prohíbe a los migrantes pedir asilo en EU, si no lo han solicitado antes en otro país, pero esa política fue bloqueada temporalmente por el juez Jon S. Tigar, de la Corte Federal de Distrito en San Francisco.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Stephanie Gri- sham, dijo ayer: “Tenemos la intención de buscar todas las opciones disponibles para abordar este fallo sin mérito y defender las fronteras de esta nación”.
Entretanto, la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) informó que falleció un mexicano que estaba bajo su custodia, en el Centro de Detención Stewart en Lumpkin, Georgia.