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El gobernante y ex guerrillero Frente Sandinista de Liberación Nacional ( FSLN ) arrasó en las elecciones municipales nicaragüenses efectuadas este domingo en un panorama de abstencionismo y consolidó el cada vez más creciente poder del presidente , Daniel Ortega , y de su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo , que ya controlan los aparatos gubernamentales, legislativos, judiciales, electorales, militares y policiales de Nicaragua.
El Consejo Supremo Electoral
( CSE ), sometido al mando de la poderosa pareja presidencial, informó hoy que, luego de escrutado el 99.98% de las juntas receptoras de votos, el FSLN recibió el 68.54% que equivale a un millón 319 mil 865 sufragios.
En segundo lugar, con 16.21% para 312 mil 223 votos, quedó el Partido Liberal Constitucionalista ( PLC ), afín al oficialismo.
El resto fue repartido entre otros siete partidos minoritarios, según el recuento del CSE que es cuestionado por las principales fuerzas opositoras que, por múltiples razones legales y políticas, se abstuvieron de participar en una contienda que se realizó bajo las reglas del régimen gobernante desde enero de 2017.
Según el conteo oficial todavía parcial, la participación fue cercana al 50%, con un millón de 925 mil 786 de votantes en un padrón de un total de 3 millones 894 mil nicaragüenses para elegir a 6 mil 88 puestos de alcaldes, vicealcaldes y concejales, con suplentes, en los 153 municipios de Nicaragua.
De un total de 13 mil 206 juntas, 254 quedan pendientes de contabilizar, informó el CSE esta tarde en su página digital.
A la espera de los detalles del resultado final, el partido gobernante ganó una gran mayoría de municipios, de acuerdo con los recuentos oficiales. “Gran victoria del FSLN en los comicios municipales”, proclamó hoy El 19, uno de los principales medios oficialistas de información.
El presidente de Venezuela
, Nicolás Maduro , un estrecho aliado de la pareja presidencial nicaragüense, felicitó hoy al FSLN por su victoria, y aseguró que “Nicaragua da ejemplo de democracia y libertad”.
“Felicidades a Nicaragua y al Comandante-Presidente Daniel Ortega por la victoria electoral amplia y contundente...es una victoria de la paz”, afirmó Maduro en su cuenta de la red social de Twitter.
La otra versión. Pese al optimismo oficialista, que exhibió la jornada como un triunfo, los sectores de la oposición mostraron otro panorama caracterizado por el abstencionismo.
Los “resultados iniciales” fueron presentados por el CSE “como la consecuencia de una fiesta cívica, pero la abstención ocupó la atención de todos los actores políticos tanto en el gobierno como en la sociedad civil”, publicó hoy el periódico La Prensa, el más importante de Nicaragua.
“Centro de votación vacíos a lo largo del día, ciudadanos desconcertados porque no pudieron votar versus las facilidades puestas por el oficialismo para que sus adeptos votaran”, describió el rotativo.
Basado en diversos cálculos de instancias de observación electoral, el diario aseguró que la abstención llegó al 70% y recordó que hasta Ortega, luego de votar en la capital, fustigó a las agrupaciones opositoras que instaron a los nicaragüenses a abstenerse de votar y alegaron que las elecciones municipales carecen de credibilidad y son una farsa del gobierno para ganar legitimidad.
Con los resultados de los comicios, el dúo gobernante desde 2007 reafirmó el mayoritario control de los municipios en el mando que, en los últimos diez años, asumió en los poderes Ejecutivo, Legislativo, Judicial y Electoral y del Ejército y de la Policía.
Ortega inició en enero pasado un tercer quinquenio consecutivo y por primera vez con su esposa en la vicepresidencia, aunque Murillo se transformó en la última década en una de las figuras políticas con mayor poder en Nicaragua junto a su esposo.
En una acusación que el oficialismo rechazó repetidamente, los opositores aseguraron que Nicaragua será gobernada por una dinastía al menos hasta 2022 que aceleró el deterioro democrático.