Buenos Aires.— Los argentinos despertaron ayer con un tipo de cambio de 820 pesos argentinos por un dólar, con los precios por las nubes y temiendo el alza en el transporte, tras el fin de los subsidios a partir de enero.
Los expertos coinciden en que no había más remedio para Argentina que una cirugía mayor y que el presidente Javier Milei no tiene más opciones. Sin embargo, la gran pregunta es si los argentinos resistirán. La Confederación General del Trabajo (CGT), principal central sindical, se quejó de los ajustes en el documento titulado No es la casta. El ajuste lo paga el pueblo. Aseguraron que “no estamos ante un plan económico, estamos ante medidas desordenadas de ajuste”. Las medidas, advirtió, “pondrán a millones de argentinos en situación desesperada”.
En los mercados se reportaron alzas al precio de la carne de hasta 30%. Se estima que el precio para los cortes “baratos” se ubique entre los 6 mil 500 y 7 mil pesos argentinos (entre 309 y 332 pesos mexicanos) el kilo, mientras que los especiales alcancen los 10 mil pesos argentinos (476 pesos mexicanos, al tipo de cambio de ayer).
Distintos comercios empezaron a recibir listas de precios con aumentos que parten del 15% hasta 100%. El alza podría continuar en los próximos días, porque hay empresas que aún no determinaron cuánto tienen que subir los valores y no entregan mercadería, informó el diario La Nación. Fernando Savore, presidente de la Federación de Almaceneros de la provincia de Buenos Aires (FABA), dijo que se recibieron nuevas listas de empresas que producen endulzantes, postres, café instantáneo y chocolate en polvo con aumentos de precios del orden de 35%.
Claudio Páez, del sector de kioscos de la Capital Federal, sumó que una firma que hace huevos de chocolate actualizó sus valores 30%, mientras que otra de golosinas ajustó en 20%. Sin embargo, con el correr de las horas, recibió más remarcaciones: una marca de encendedores ajustó los precios 100%; una empresa alimenticia subió sus productos entre 43% y 84%; una marca de preservativos incrementó 60%; las papas fritas de tubo aumentaron 100%; productos de higiene personal, 50%, y los caramelos confitados, 100%.
María Mamani se dedicó ayer a cambiar los precios de los productos, en momentos en que la inflación a 12 meses llega a 160.9%. “Muchas cosas se están empezando a disparar y lamentablemente eso puede durar hasta seis o 12 meses más”. En una tienda cercana, lo mismo: los precios subieron entre 20% y 60%.
Milei ha dicho que el ajuste podría tomar hasta dos años, y los argentinos se preparan para una triste Navidad.
Julia González no sabe cómo hará ahora para costear los traslados en tres autobuses y un tren hasta su trabajo en el centro de Buenos Aires. “Si sube más [el boleto], el sueldo se me va en transporte”, dijo a The Associated Press González, de nacionalidad paraguaya y residente en Argentina desde hace más de una década, mientras esperaba la llegada del autobús. Madre de una adolescente, dijo que ella y su marido hacen “malabares” para llegar a fin de mes con un ingreso total de 300 mil pesos argentinos (14 mil pesos mexicanos) en un contexto de constante alza de precios de alimentos, vestimenta y educación.
Las petroleras subieron los precios de los combustibles en promedio entre 35% y 40%, dependiendo la zona del país, con alzas de hasta 45% inclusive. Así, los valores aumentaron 65% en menos de siete días, porque las empresas habían aplicado otra alza el viernes pasado, de entre 15% y 30%, dos días antes de que asumiera Milei. Desde el 19 de noviembre, después del balotaje, los precios de la nafta y el gasoil subieron 100%; es decir, se duplicaron en menos de un mes. “A este gobierno no le han dejado un paciente con un dolor de muelas, hemos encontrado un paciente en terapia intensiva a punto de morirse. No estamos dispuestos a que se muera”, justificó el portavoz del gobierno, Manuel Adorni.
Los expertos le conceden razón. Sin embargo, advierten que todavía falta cómo va a quedar reorganizado el gobierno. “En los primeros tiempos, los precios subirán y, como dijo el presidente en el Congreso cuando asumió, la inflación será alta en los meses venideros. Ese efecto es irremediable. Para atender esa coyuntura, entre tanto ajuste, Milei abrió la billetera para reforzar los planes sociales —se mantendrán los planes sociales de trabajo en cooperativas, se fortalecerán las asignaciones económicas para los más pobres por hijos menores de edad y en compra de alimentos—”, explicó el periodista Diego Cabot en La Nación.
Echan abajo decretazo de Fernández
El gobierno derogó un decreto que firmó Alberto Fernández antes de dejar el poder y por el cual el ahora exmandatario disponía cambios en su custodia oficial una vez que dejara el Ejecutivo, incluso en el exterior. “¡Se terminan los privilegios de la clase política!”, advirtió la nueva ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.