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Londres.— La muerte del duque de Edimburgo, marido de la reina Isabel II, ha generado un alud de reacciones de afecto por parte de casas reales y gobiernos.
El Parlamento del Reino Unido ha sido convocado el próximo lunes 12 de abril, para que diputados y lores puedan rendir tributo al duque de Edimburgo.
El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, lamentó la muerte de Felipe de Edimburgo, quien inspiró y se ganó el afecto de varias generaciones de británicos.
El gobierno irlandés se mostró entristecido por el fallecimiento, a los 99 años, del esposo de la reina Isabel II. El gobierno norirlandés, de poder compartido entre unionistas y nacionalistas, destacó ayer el papel desempeñado por la monarquía británica para reforzar el proceso de paz de la provincia y normalizar las relaciones entre el Reino Unido e Irlanda.
Los candidatos a las elecciones al Parlamento de Escocia, que se celebrarán el próximo 6 de mayo, anunciaron la suspensión inmediata de todos sus actos de campaña.
Los reyes de España expresaron su profunda tristeza y destacaron de Felipe de Edimburgo el legado de servicio y dedicación a la corona y al Reino Unido. Los reyes de Bélgica, Felipe y Matilde, transmitieron sus condolencias. Los reyes de Países Bajos, Guillermo Alejandro y Máxima, destacaron la personalidad vibrante que ha dejado una impresión inolvidable del duque de Edimburgo. El príncipe Enrique de Inglaterra y la duquesa de Sussex, Meghan Markle, agradecieron al príncipe Felipe su servicio.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la primera dama, Jill Biden, lamentaron la muerte del príncipe Felipe de Edimburgo y afirmaron que su legado pervivirá más allá de su familia.
Los Obama destacaron que el príncipe Felipe supo combinar ambición con altruismo. El premier canadiense, Justin Trudeau, expresó su pesar. El exmandatario Donald Trump también rindió homenaje.
El presidente ruso, Vladimir Putin, envió a Isabel II un telegrama de condolencias.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, extendió sus condolencias a la reina Isabel II, a la familia real británica y al pueblo del Reino Unido. Hizo lo propio el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli.
La canciller alemana, Angela Merkel, también expresó su profundo pesar por la muerte del príncipe Felipe. El presidente de la República de Italia, Sergio Mattarella, resaltó “la sincera amistad hacia el pueblo italiano”.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, lamentó la muerte del príncipe Felipe, al igual que enviaron condolencias desde Cuba, Argentina, Nicaragua, Honduras y República Dominicana. El premier de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que Felipe de Edimburgo fue un servidor público consumado. Diversos líderes africanos mandaron sus condolencias.
