“México es mi nuevo hogar, no tengo miedo, quiero ser libre”, comentó James Rigaud, migrante Haitiano quien trabaja y vive en la Central de Abastos (CEDA) de la Ciudad de México, el busca tener para poder traer a su familia por el cierre en la frontera con Estados Unidos.
James, quien busca el sueño “Chilango”, llegó a tierras mexicanas hace quince meses, quien quedó varado después de fracasar al querer migrar al país Norte Americano, esto después de que huyera de su país por la crisis económica que dejaron los terremotos del 2010 en Haití.
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Migrante lleva un año en tramites para su residencia en México
“Aquí en México, en la central de abasto encontré el trabajo para los migrantes, con lo que gano puedo mantener a mi familia que está en mi país”, dijo Rigaud mientras cargaba costales de papa en la CEDA.
De ser albañil, hasta diablero, James de treinta años de edad, llegó a la Ciudad de México hace casi un año en busca de tramitar su solicitud de asilo para poder realizar una nueva vida en México.
James busca traer a su familia a México
“Ya no quiero llegar a Estados Unidos, quiero quedarme aquí hasta que salga mi residencia y poder traer a mi familia; ve cómo estoy, aquí no discriminan si trabajas”, puntualizó James.
James trabaja en una local que distribuye verdura en la CEDA, ubicado en la alcaldía Iztapalapa, quien menciona que gana un aproximado de trescientos pesos diarios y con dos comidas al día y quien tiene que pasar las noche laborando o en albergues que se encuentran en la misma demarcación.
vcr