La Contraloría General y la Procuraduría General de Justicia (PGJ), ambas de la Ciudad de México, investigan a los exfuncionarios involucrados en el otorgamiento del Permiso Administrativo Temporal Revocable (PATR) de los espacios publicitarios de la Línea 7 del Metrobús, mismos que fueron retirados por el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) la madrugada del martes 5 de noviembre, informó la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo.
Al cuestionarle sobre los responsables, la mandataria comentó que podrían ser exfuncionarios de la Secretaría de Movilidad o lo que era la Oficialía Mayor; no obstante, según el contrato de este PATR, el permiso fue otorgado el 27 de abril de 2017 por el exdirector del Metrobús Guillermo Calderón Aguilera, actual titular del Servicio de Transportes Eléctricos (STE).
El pasado martes, el Invea cumplimentó el acuerdo emitido por el Tribunal de Justicia Administrativa de la Ciudad de México, para el retiro de publicidad instalada en mobiliario urbano aledaño a las estaciones Campo Marte, Auditorio, Antropología, Gandhi, Chapultepec, La Diana y El Ángel, de la Línea 7 del Metrobús.
La dependencia informó que durante el operativo se retiraron 13 carteles y se revisaron nueve pantallas instaladas en mobiliario urbano, para constatar que no estuvieran en funcionamiento.
“Había ahí dos amparos, pero finalmente hay una resolución y está el tema del Instituto Nacional de Antropología e Historia [INAH] (…) Ese es el tema central, que una buena parte de la infraestructura de la Línea 7 se construyó a partir de los permisos de publicidad; sin embargo, por ser Reforma no tenía todas las autorizaciones del INAH para poner publicidad”, explicó.
Destacó que aunque se quitó la publicidad, no se tiene establecido retirar la estructura, pues no afecta la operación de la ruta que va de Indios Verdes a Campo Marte.
La empresa JCDecaux ganó el PATR por 10 años, con el que se obligaron a diseñar, instalar y dar mantenimiento a las estaciones de la línea en cuestión, que iría hasta Santa Fe; sin embargo, al modificarse el proyecto se tuvieron que adecuar las estaciones del Metrobús, también se encargarían de modernizar los paraderos de Campo Marte a Santa Fe.
A cambio, el Gobierno local les permitió explotar la publicidad e instalar muebles para este fin, adicionalmente tendrían que pagarle una contraprestación.