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Mientras el programa de comedores comunitarios se quedó sin dinero a nivel federal, la CDMX reforzará los establecimientos que coordina con más presupuesto, modernización, mejora del servicio y apertura de más sitios, dijo la secretaria de Inclusión y Bienestar Social (Sibiso), Almudena Ocejo.
En la capital se registraron 478 centros, según la lista que la pasada gestión entregó a la secretaría. A la fecha, operan 458; 20 están suspendidos o no se encontraron.
La meta este año es llegar a 500 en zonas de alta marginación, en los cuales se vende una comida completa a 10 pesos, detalló Ocejo Rojo.
En entrevista con EL UNIVERSAL, la titular de la Sibiso sostuvo que a la Ciudad no le afectará la medida de la Federación de no etiquetar recursos públicos para los comedores que eran operados en diversos estados.
“No hay ninguna interrupción, [el programa de comedores] sigue porque tiene más recursos y estamos haciendo una revisión a fondo de lo necesario para que todos tengan un mismo estándar de atención a la gente”, explicó la funcionaria.
Este año hay un presupuesto de 270 millones de pesos para la operación de los comedores. La meta es brindar 15 millones 882 mil raciones en 2019. En contraste, en 2018 la anterior administración había asignado 257.8 millones de pesos. Iztapalapa, Tlalpan y Gustavo A. Madero son las alcaldías con más comedores.
“Vamos a meter modernización digital para tener un contacto y seguimiento más eficaz con nosotros y para facilitar la vida a los administradores de los comedores. Vamos a renovar y fortalecer este modelo de inclusión comunitaria y combate a la pobreza”, agregó Ocejo Rojo.
Digitalización
La secretaria detalló que está en elaboración una aplicación para teléfonos celulares en la que los usuarios podrán ubicar los comedores, además de una plataforma por internet para que la secretaría y los comités administrativos de los comedores estén en contacto, se transparente cuántas personas llegan, se hagan pedidos de alimentos en línea, entre otros.
El Gobierno local creó este programa en 2009. Para hacer los alimentos, las autoridades abastecen sin costo los insumos no perecederos y los operadores de los comedores compran los no perecederos y administran los recursos generados.
El gobierno federal replicó en 2013 la estrategia y creó 5 mil comedores, pero este año no se le asignaron recursos debido a posible corrupción en la operación, como informó este diario el 12 de marzo.
Irregularidades
Almudena Ocejo dijo que aunque la pasada administración les reportó 478 comedores, se detectaron 10 casos fantasma, debido a que ya no existían en los inmuebles reportados, además “tampoco hay registro de por qué ya no están”.
A su vez, fueron suspendidos otros 10, cuatro a petición de los operadores y seis debido a problemas de mantenimiento o porque no daban el total de raciones establecidas a pesar de que por el bajo costo se agotan a diario en poco tiempo.
Almudena Ocejo señaló que ya dieron vista a la Secretaría de la Contraloría General el caso de los comedores que ya no existen y los suspendidos para que se investiguen si hay responsabilidades administrativas. Otra irregularidad es que si bien el año pasado se estableció una meta de comidas a otorgar, no se cumplió.
“Queremos reforzar [el programa] y vincularlo a otras actividades como el de mejoramiento barrial, con los Pilares, hacer corredores barriales, porque esos espacios ya están en las calles”, dijo Almudena Ocejo.
