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Toluca, Méx.— “Su único error fue haberse levantado para ir al baño”, comentaron familiares de Miguel “N”, escolta del exfiscal regional de Cuautitlán México, Elohim Díaz, asesinado el pasado 21 de enero en el municipio de Metepec, pues pasó de ser un testigo a presunto culpable.
En entrevista para EL UNIVERSAL, dijeron que actualmente Miguel se encuentra en el Centro Preventivo y de Reinserción Social de Lerma, donde lo mantienen incomunicado, ni ellos ni su abogado han podido hablar con él y tampoco ver la carpeta de investigación.
“Él fue llevado a declarar como testigo, después de eso no declaró como testigo, lo pusieron a disposición por un delito que se llama cohecho, es inventado por la fiscalía durante el tiempo que estuvo retenido”, indicó un familiar de Miguel que pidió mantener el anonimato.
Los familiares tienen preocupación de la situación jurídica, pues consideran que la fiscalía podría estar fabricando pruebas incriminatorias. “Están armando una carpeta de investigación y fabricando por el homicidio que obviamente él no cometió, tan es así que se quedó en el lugar, (...) una orden de aprehensión por el delito de homicidio nos preocupa, pues vulnera sus derechos y quieren negarle la libertad”.
