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Un contingente de cerca de 100 mujeres integrantes de colectivos feministas y familiares de víctimas de feminicidio marcharon del Monumento a la Revolución al Zócalo capitalino, en esta ocasión para protestar por la muerte de la maestra Susana Garrido, presuntamente a manos de su esposo.
Para controlar la movilización de los grupos feministas, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) desplegó un grupo de aproximadamente 500 mujeres policías que vigiló a las manifestantes que recorrieron un tramo de Paseo de la Reforma, avenida Juárez y 5 de mayo en su caminata hacia el Zócalo.
A su paso, de nueva cuenta pintaron paredes, fachadas de negocios y vallas, además de lanzar dispositivos de humo hacia las policías que seguían la manifestación, sin que las uniformadas respondieran a las agresiones, como ha ocurrido en las movilizaciones de las mujeres, debido a que la instrucción es acompañar a los contingentes.
Se concentraron frente a Palacio Nacional y gritaron consignas en protesta por la muerte de la profesora Garrido, el 29 de abril, hecho por el que se detuvo a su marido y padre de sus hijos, el cual se encuentra bajo proceso penal por el delito de feminicidio.
En su mensaje por el tercer aniversario de su victoria en las elecciones de 2018, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que los feminicidios aumentaron 14% durante su gobierno y en la capital del país registran la misma tendencia.
Tras la protesta en el Zócalo, las mujeres se retiraron hacia el Monumento a la Revolución bajo la vigilancia de la policía sin que se registraran mayores enfrentamientos.
